El griego se ha dejado un set en el camino frente a un gran versión de Báez. Stefanos acabó demostrando su mayor experiencia (7-6(1), 6-7(5), 6-3, 6-4) y ya está en tercera ronda. El próximo rival será Dimitrov o Paire.
Duelo importante para el tenis argentino entre Tsitsipas y uno de esos jóvenes que han enamorado a todo el país, Seba Báez. Hace unas horas había perdido Schwartzman dando una de las sorpresas negativas de la cuarta jornada. Esta vez Stefanos era el gran favorito, pero la afición argentina tenía mucha esperanza en un partido o al menos que Seba peleara el partido y tuviera opciones. El argentino debutó con un triunfo en cinco mangas ante Ramos y mucho menos desgaste tuvo en sus piernas Tsitsipas, que disipó dudas sobre su lesión en el codo.
El griego se lleva el duelo
Tsitsipas empezó un paso por delante. Al resto estaba cómodo, intentando dominar con su drive. Báez luchaba cada punto como de costumbre y en los momentos que estaba el límite sacaba su mejor versión. En los dos primeros turnos de servicio necesitó salvar hasta siete bolas de break. Lo hizo y de esta manera podía seguir pegado en el marcador. Poco a poco fueron llegando a los juegos clave. En el noveno juego Báez se encontró con dos bolas de break y quebró. El argentino tenía en sus manos el servicio para cerrar la primera manga.
Stefanos estaba en otras cuerdas pero reaccionó de la mejor manera, con un contrabreak. Finalmente la primera manga se decidió en el tie break y aquí el heleno sacó a relucir su mayor experiencia y se lo llevó por 7-1 después de un buen set de Seba Báez.
En la segunda manga ambos estuvieron muy acertados con su servicio. No hubo ni una sola alternativa al resto en los 12 juegos que tuvo. El argentino fue siempre por delante en el marcador y pasaba la presión al otro lado. Aunque parecía que iba a tener oportunidades en los juegos decisivos no llegaba esa esperada bola de break. Otra vez se iban al tie-break pero esta vez sí había aprendido la lección. Con el 6-5 tenía bola de set y a la primera acertaba para poner el partido en tablas.
Tsitsipas volvió a salir con una marcha más en el tercer set y es que no quería sustos. Rápidamente y gracias a un doble break se marchaba hasta el 5-0. Báez salvó dos bolas de set que hubieran significado un rosco en contra y además fue capaz de meter miedo en el cuerpo del griego. Báez ganó tres juegos consecutivos para llegar hasta 5-3. Luego Tsitsipas sin mayores problemas en el noveno juego ganó su servicio y se quedaba solo un set de estar en la tercera ronda.
Tsitsipas necesitaba coger ventaja en el marcador para no tener problemas y necesitar de un quinto set. En el tercer juego se encontró con cuatro bolas de break y aprovechó la última para abrir hueco en el casillero. Con el 5-3 restaba para ganar el partido pero Báez sacaba el juego adelante y pasaba la presión al otro lado. Con el 40-0 llegaban las bolas de partido y a la segunda cerraba el duelo.