Emil Ruusuvuori se quedó con una auténtica batalla sobre el francés Gael Monfils. El tenista finlandés se llevó el partido por la primera ronda del Australian Open en cuatro sets (3-6, 6-4, 7-5, 3-6, 6-3), en 3 horas y 49 minutos de acción. El No.86 del ranking, enfrentará en su próximo cruce al ganador del duelo entre Pedro Martínez y Yoshihito Nishioka.
El francés de 34 venía de disputar la ATP Cup representando a su país, aunque nada más jugó un partido en la serie ante Italia, donde cayó en dos sets frente a Matteo Berrettini. El jugador de Finlandia, mientras tanto, jugó el Murray River Open, ganando ante Viktor Troicki antes de quedar eliminado con Borna Coric en sets corridos. No había enfrentamientos en el historial entre ambos.
Ruusuvuori prevaleció en la batalla
Monfils comenzó el partido un poco mejor que el finlandés y consiguió un break rápido, en el tercer juego. Manteniéndose muy firme al servicio, tomó cierto dominio del juego, y a pesar de que Ruusuvuori recuperó el quiebre, el galo volvió a romper el servicio de su rival para terminar quedándose con el primer set por 6-3.
Ruusuvuori salió mucho más decidido al segundo set, y aprovechando una serie de errores no forzados con la derecha, además de una doble falta del francés, logró quebrar y ponerse arriba 1-0. El finlandés mejoró muchísimo en sus juegos de saque y empezó a sentirse más cómodo con sus tiros, aprovechando la confianza del break a favor. Sin dejarle oportunidades a Monfils, el escandinavo cerró el set a su favor por 6-4.
El tercer set suele muy importante en casos como este, ya que quien lo gana, queda muy cerca de la victoria, y el que lo pierde, suele quedar muy diezmado en lo anímico. Justamente por eso es que se entiende el desarrollo de esta manga entre Monfils y Ruusuvuori, con dos quiebres para cada uno y muchas oportunidades en la mayoría de los games. Luego de quebrar otra vez en el onceavo juego, el finlandés terminó el set con su servicio, ganándolo por 7-5.
El cuarto parcial mantendría la tendencia del tercero, con los dos jugadores bastante irregulares, y sin encontrar estabilidad en sus juegos de saque. Monfils comenzó a arriesgar más con su derecha, y le dio resultado a corto plazo, concretando un break en el sexto juego. Esa diferencia sería suficiente para , luego de afrontar puntos de quiebre en contra, llevarse la manga por 6-3, en un partido que hasta ese momento, ya tenía tres horas de acción.
Set definitorio
Por supuesto, el último set no sería excepción al resto del partido, y nuevamente aparecían las dudas para los sacadores, y una infinidad de rallies desde el fondo de la cancha. El duelo ya entró en un momento en donde el que lograra quebrar, tendría todas las chances de ganar. Y así fue como Emil Ruusuvuori quebró el saque del galo para colocarse 4-1. Manteniendo su servicio, y a pesar de los intentos de Monfils, el finlandés selló el triunfo con un 6-3 final.