Alejandro Moro Cañas se despide del Challenger de Málaga en cuartos de final tras caer ante un gran Emilio Nava en un partido a dos sets.
Se cerraba la jornada de cuartos de final del Challenger de Málaga con un partido entre dos jóvenes jugadores que querían hacerse con un puesto en semifinales. Alejandro Moro Cañas venía arrojar luz a una pésima jornada de los españoles el día anterior con una gran victoria ante Daniel Galán en dos sets. Emilio Nava llegaba tras superar las dos primeras rondas sin problema y firmar un gran partido ante el local Albert Ramos Viñolas. El cara a cara entre ambos se estrenaba con este partido en el que el estadounidense partía como favorito claro, aunque no podía confiarse.
Moro Cañas se lleva el primero
El partido comenzó de manera totalmente alocada, con una sucesión de breaks que mostraba lo igualado que iba a estar el partido. Tras una derecha cruzada larga de Nava, Moro se adelantaba con la primera rotura, pero perdió su siguiente saque con un revés cortado que no entró. Tras esto, se dio otro intercambio de quiebres para poner el 2-2 y saque para Emilio. Sin embargo, Moro volvió a desnivelar el marcador con el quinto break consecutivo gracias a una doble falta de Nava. El estadounidense estaba siendo muy irregular y Moro Cañas aprovechó la situación para ganar el primer set con un 6-2 tras un saque directo a la zona de la T en el lado derecho.
Nava se mete en el partido
El segundo set comenzó con la misma igualdad, pero sin las roturas como protagonistas. El americano templó sus nervios y comenzó a reducir su nivel de errores, algo que le ayudó a nivelar el juego. Por si fuera poco, se hizo con un quiebre en el sexto juego tras un revés paralelo fuera del español. Ya con el 4-2 en el marcador, Nava optó por centrarse en ganar sus servicios restantes para cerrar el set. La estrategia funcionó y Emilio se llevó el segundo set con un 6-3. El jugador estadounidense había subido considerablemente su nivel y se disponía a dar vuelta al encuentro.
Emilio se lleva un partido durísimo
El tercer set tuvo un comienzo similar al segundo, con ambos ganando sus saques sabiendo que una rotura podía decidirlo todo. La igualdad duró seis juegos, con Nava quebrando gracias a una doble falta del español para el 4-3. A pesar de esto, Moro reaccionó de gran manera y logró recuperar la desventaja en el juego posterior con una derecha paralela al pasillo de dobles de su rival. Cuando el marcador señalaba el 5-5 el estadounidense gozó de hasta tres opciones de quiebre, aprovechando la última con un precioso globo de derecha. Finalmente, tras un juego lleno de tensión con oportunidades para ambos. Nava cerró el choque con un 7-5 tras un remate al centro que Alejandro no pudo devolver.