El tenista ruso intenta defender el título en el torneo que reúne a las ocho mejores raquetas del circuito masculino. Medvedev recordó su título de la edición anterior y se mostró feliz por las sensaciones que está encontrando.
Daniil Medvedev está en Turín como uno de los favoritos y es que tiene la difícil misión de intentar revalidar el trofeo de campeón. El pupilo de Cervara tiene de por medio a jugadores de mucho talento y entre ellos el actual No.1 del ranking al que ya derrotó en la final del US Open, Novak Djokovic. Medvedev habló tras superar la fase de grupos sobre su título en 2020 y como ha sido el cambio de sede de Londres hasta Turín. También se mostró muy optimista por las sensaciones que ha tenido durante estos dos primeros partidos que ha disputado.
El cambio de sede a Turín
“Definitivamente es diferente. Es una ciudad diferente, un lugar diferente. Necesitas tiempo para acostumbrarte. Siento que los primeros días no siempre es fácil cuando vienes a cualquier torneo que juegas por primera vez“.
“Todo el mundo me pregunta cómo me siento como campeón defensor. Siempre respondo que siento que no hay un campeón defensor. Es solo un nuevo campeón en una nueva ciudad, que es Torino. Realmente lo he disfrutado hasta ahora, especialmente porque estoy jugando bien. Espero más“.
Elogios para el público italiano
“Los aficionados italianos son apasionados. Tenemos cola frente a nuestro hotel sin importar si llueve o hace sol. ¡Por supuesto, un poco más cuando hace sol! Eso demuestra lo apasionados que son por el tenis“.
El gran título en 2020
“Los mejores recuerdos fueron las semifinales y la final. Por supuesto que recuerdo cada partido, cada partido fue duro. Pero en las semifinales estaba abajo, Rafa Nadal sirvió para el partido. Recuerdo que sentía que estaba jugando bien. Estaba en muy buena forma, acababa de ganar París. Estaba parado allí y pensé: ‘¿De verdad voy a perder así y volver a casa?’. La casa estaba cerca. Era el último torneo del año, así que no quería terminar de esta manera y estuve feliz de haber logrado quebrar, porque no vas a remontar todo el tiempo, especialmente contra alguien como Rafa“.
“En la final contra Dominic Thiem fue lo mismo. Me dominó por completo durante gran parte del partido. Creo que en 3-3 o 4-4 tuvo algunos puntos de quiebre y recuerdo uno que tuvo un golpe de derecha fácil de alguna manera. Estaba en la red y la perdió. Pero de eso se trata el tenis. Logré ganar los dos partidos, fueron dos horas y media, dos horas y 45 minutos. Estos dos partidos quedan en mi memoria porque endulzan aún más el título” finalizó el ruso tras superar la round robin.