Este fin de semana Charly Berlocq superó a Blaz Rola por un contundente (6-2, 6-0) y se consagró campeón del Challenger de Panamá. A sus 35 años se ubica en el puesto 115 del ranking mundial, una vez más se coloca a las puertas del top-100 y muy cerca de entrar directamente a Roland Garros.
Con este nuevo título, Charly sumó 19 Challengers y se afirma como el tenista argentino con más títulos en esta categoría, dejando atrás a Machi González con 17 y Horacio Zeballos con 15.
Ascendió hasta el puesto 115 del ranking mundial, lo coloca nuevamente muy cerca del top-100. El selecto grupo al que ingresó por primera vez en 2005 y desde entonces casi no lo abandonó. Algunas lesiones, o bajones en su rendimiento lo alejaron esporádica-mente en más de una oportunidad, pero siempre volvió. Teniendo en cuenta que se viene la temporada sobre polvo de ladrillo, la superficie donde mejor rinde “El Gladiador”, su regreso al círculo privilegiado sería un hecho más que factible.
Claro que no todo fue fácil en la vida de Charly, todo lo contrario, fue una carrera llena de sacrificios, hecha con mucho esfuerzo. Como más de una vez lo contó él mismo, fue una vida hecha a presión. En las categorías menores la presión era estar entre los primeros para no perderse las becas, ya que no contaba con recursos propios para solventar su carrera. Luego en Future la presión era ganar esta semana para tener con qué pagar sus gastos la semana siguiente.
Así con mucho esfuerzo Charly fue forjando su exitosa carrera. Hace ya 19 años, en el año 2000 empezó en Future, ese mismo año a los pocos meses de iniciado su carrera consiguió su primer punto. En el 2002, a los 19 años festejó el primero de sus 10 títulos Future. En el 2005 conquistó su primer Challenger, también en esa temporada alcanzó por primera vez el top-100. Su primer título ATP llegó cuando ya tenía 30 años. Una sólida carrera hecha con mucho trabajo y sacrificio.

También la historia contará que fue un protagonista importante en el equipo de la Copa Davis. Fue convocado por primera vez en 2012, entre singles y dobles jugó 20 partidos. Su partido más importante lo jugó en 2013 cuando le ganó a Gilles Simón el quinto partido que llevó a la Argentina a las Semifinales del Grupo Mundial.
Otro aspecto interesante de la carrera de Charly es que lo comparte con su familia. Primero viajó con su pareja, quien luego se convirtió en su mujer, luego con la llegada de sus hijos, ellos también se incorporaron a sus giras, y forman parte muy importante de su quehacer cotidiano, de su vida como tenista.
La leyenda dice que Charly encontró una raqueta de madera de su papá cuando tenía tres años y de allí no la soltó nunca más. Desde muy pequeño iba por las canchas casi arrastrando su raqueta. Empezó en su Chascomús natal, luego en Mar del Plata donde se radicó su familia cuando tenía 12 años. Como buen argentino, es un jugador con cábalas, que van variando de acuerdo al momento y a las circunstancias, pero contó tener cábalas permanentemente.
Objetivo Roland Garros
Como si todo esto fuese poco, una buena actuación esta semana en el Challenger de Mexico le podría dar esa oportunidad de ingresar directamente a Roland Garros. Charly es el tercer preclasificado y viendo su cuadro su llegada hasta las semifinales no parece ser un imposible. Claro que jugó toda la semana pasada en Panamá, donde festejó el título, habrá que ver si su cuerpo y su mente puedan asimilar tanto esfuerzo.
Con este nuevo título, Charly avisó que su tenis está intacto, que puede competir codo a codo con los mejores, que está para dar muchas más alegrías al tenis argentino y que dispuesto a dar la pelea para volver a ser Top-100.