Gustavo Tavernini y Federico Delbonis forman una de las duplas más antiguas en el circuito ATP. Ambos trabajan juntos desde hace 15 años. El coach habló con el programa argentino Cambio de Lado tal y como recogen unas declaraciones que no tienen desperdicio Diario de Tenis.
Difícil es ver que un tenista y un entrenador tengan una larga trayectoria juntos. En cambio Tavernini y Delbonis llevan 15 años trabajando juntos. Después de tanto tiempo y de duros momentos Gustavo recuerda en Cambio de Lado ese gran año 2016, en el que su pupilo fue el gran héroe de una Copa Davis, tras ganar en el quinto punto a Ivo Karlovic y dar la única Ensaladera que hasta el momento tiene Argentina.
Lo especial de la Davis
Pocas competiciones se asemejan por no decir ninguna a la Copa Davis. A pesar de los cambios que ha tenido en el último año con el nuevo formato Tavernini recuerda todos los momentos especiales que les ha dado esta prestigiosa competición por equipos. «Fue muy lindo compartir el proceso de Fede jugando Copa Davis, no solo el año que ganó, sino también las series anteriores cuando se iba conformando el equipo. Los recuerdos son muchos«.
La eliminatoria en Zagreb
Así es el tenis y es que como recuerda su entrenador, esa temporada no había tenido mucha participación pero en Zagreb fue protagonista principal. «Él no venía teniendo mucha participación esa temporada. No había jugado ante Polonia pero fue clave ante Italia. Contra Gran Bretaña otra vez sin actividad y luego llegó la jornada inolvidable en Zagreb«.
Sin duda que fue la mejor experiencia que les ha dado el tenis. «En el medio pasaron muchas cosas. Formé a Fede desde muy chico, fue algo muy gratificante y a pesar de no ser muy demostrativo, fue algo lindo» explicó tras una larga vida juntos.
Confianza ciega en Fede
Delbonis fue el elegido para disputar ese quinto punto que iba a decidir al campeón de la Copa Davis en 2016. Tavernini recuerda que el objetivo era que Fede disputara ese partido ya que estaban convencidos de que iba a ganar. «Cuando volvió Fede de su última gira, estábamos convencidos que iba a jugar el quinto punto. El grupo de trabajo también incluía Horacio Anselmi, el preparador físico y las charlas iban por ese lado. Queríamos jugar ese quinto punto, como sea. Sabíamos de la capacidad y que Fede podía hacer algo impresionante«.
Los momentos previos
Hazaña fue ya lo que consiguió Del Potro después de dar la vuelta al partido tras ir 2 sets abajo. Mientras tanto Delbonis entraba en calor por si hacía falta disputar el quinto partido. «Lo mío era mantener la calma. Esperar que Juan Martín pueda dar vuelta ese partido muy duro. Hacíamos la entrada en calor en un gimnasio, intentando sacarle presión al momento, en especial cuando se empieza a dar vuelta el cuarto punto«.
También recuerda lo importante que es mantener la piña y animar al jugador. En esos momentos su rival, Karlovic trabajaba solo en el gimnasia. «En un momento nos aislamos e hicimos una entrada en calor muy fuerte. Justo Karlovic estaba en el mismo lugar porque era el gimnasio que compartíamos, estaba solo. En cambio nosotros apoyábamos a Fede y lo motivamos a más no poder«.
Del Potro fuerza el quinto punto
Tras una remontada de las que no se olvidan Del Potro forzó el quinto punto de la eliminatoria. Graciosa la anécdota que pasó justo antes con del partido definitivo con el de Tandil. «Cuando Delpo gana el punto, la euforia era total. Delbonis ya estaba listo. Y si hay algo que nunca me voy a olvidar, es la cara de Juan Martín preguntándome como estaba Fede para entrar a jugar, eso fue en la ronda antes de entrar a la cancha. Quería saber cómo estaba para encarar un punto tan importante. Me acuerdo que le dije que se quede tranquilo que todo iba a estar bien, íbamos a ganar» explicó Tavernini.
Un triunfo inolvidable
No caben dudas que es lo más importante que ha logrado Delbonis en su carrera y que le ha llevado a ser el héroe de un país. Argentina vivió algo especial aquella temporada y en esa eliminatoria que nunca pasará al olvido. «El momento del triunfo fue algo inolvidable. Algo que va a quedar para siempre«.
Un desgaste que mereció la pena
La Copa Davis es dura, más por la preparación que conlleva. Por eso vemos que hay muchos grandes tenistas que una vez la han conseguido no disputaban todas las eliminatorias. Hablamos en pasado porque con el nuevo formato de la competición esto ya no ocurre. De todas formas lo importante es que esto pasó factura en la carrera individual de Federico Delbonis, aunque como su mismo entrenador reconoce es algo que merece la pena. «Los dos años de Copa Davis fueron muy intensos, Fede le puso muchas semanas de trabajo, quizás más que a su carrera habitual. Fue un desgaste enorme que se pagó en las próximas temporadas, con algunas lesiones. Pero la felicidad sigue siendo enorme» finalizó.
