La estadounidense vuelve a lograr una victoria WTA y en un torneo de categoría 1000. Serena reflexionó sobre la importancia de este triunfo mostrando esperanza de cara a sus próximos compromisos.
Serena Williams volvió a sumar una victoria en el circuito femenino un año más tarde de su último triunfo. Sin duda un momento de alegría para todo el público presente en Toronto y para la propia Serena. La estadounidense se mostró muy feliz y quiere seguir disfrutando del tenis. Navratilova habló también sobre el momento de las hermanas Williams y añadió que pueden estar viviendo su último año pero sin que nadie sepa nada de ellos. La propia Martina se recriminó su mala gestión a la hora de anunciar su retirada a la prensa y lo que conllevó ese mensaje.
Esperanza tras la victoria
“Creo que solo hay una luz al final del túnel”, dijo riendo. “No sé, me estoy acercando a la luz, así que… Últimamente eso ha sido todo para mí. No puedo esperar para llegar a esa luz. Esa luz significa libertad. Sin embargo, me encanta jugar, así que es increíble. Pero, ya sabes, no puedo hacer esto para siempre. Entonces es como si a veces solo quisieras hacer tu mejor esfuerzo para disfrutar los momentos y hacer lo mejor que puedas“.
Las palabras de Navratilova
“Nadie puede decirte cómo debes llorar, al igual que nadie debe decirte cómo jubilarte. Es totalmente personal. Tal vez las chicas hicieron un pacto, tal vez no. Tal vez no lo sepan, solo están jugando y disfrutando. Cada situación es completamente diferente, obviamente. No hay una forma correcta o incorrecta de hacerlo. Les encanta el tenis, eso es lo que hace que la gente regrese, una y otra vez. Te mantiene jugando más de lo que pensabas. Particularmente, Venus y Serena. Los recuerdo diciendo que no iban a jugar más allá de los 25 años o algo así, y aquí están“.
La mala gestión en la retirada de Navratilova
“Era el otoño de 1993 y dije, ‘Está bien, el año que viene es mi último año. Y le dije a la prensa eso, y desearía no haberlo hecho. Fue un adiós de un año. Simplemente pasa factura, cada semana, cada torneo es un adiós. Llegó a ser muy emotivo. Pete Sampras, a la edad de 31 años, ganó el US Open de 2002 y nunca más jugó. No fue hasta muchos meses después que reconoció su retiro” añadió sobre la mala gestión en su retiro.