El joven danes, que ha recibido varios wild card en lo que va del 2021, venció en la final al argentino Marco Trungelliti por 6-3, 5-7, 7-6(5) en 3h de partido para alzarse con el título del Challenger de Biella 7.
Camino hacia la final
El danes, en su viaje hasta la definición, venció: en primera ronda al alemán Daniel Altmaier 6-2, 6-7(4), 7-6(5); en segunda rueda al portugués Gastao Elías 6-3, 7-6(3); ya en los cuartos de final al francés Alexandre Muller 6-4, 6-4; y en las semifinales al argentino Tomás Etcheverry por 7-5, 2-6, 6-2.
Por el lado del argentino, derrotó: en primera rueda al francés Hugo Grenier por 6-0, 6-2; en segunda al italiano Lorenzo Giustino por 6-4, 6-2; en los cuartos de final al italiano Jacopo Berrettini por 7-5, 6-3; y en las semifinales al brasileño Felipe Meligeni por 6-3, 3-6, 6-3.
Rune da vuelta una gran batalla ante Trungelliti
Comienzo de set muy parejo en los primeros seis game, aunque a Holger Rune complicaba más desde la devolución que Marco Trungelliti. Los turnos de saques del santiagueño fueron más largos que los del copenhagués. En el séptima juego, el danés forzó con las respuestas al servicio, conectó tiros ganadores y consiguió el quiebre. Luego, sostuvo para confirmar la distancia. En el noveno juego, el argentino perdió los estribos, sumó cantidad de errores no forzados y Rune selló el primer parcial por 6-3 en 38 minutos.
En la segunda manga, Marco Trungelliti comenzó con quiebre a su favor, lo que parecía que iría a cambiar el rumbo del encuentro. Sin embargo, Holger Rune volvió a molestar desde la devolución y recuperó. Luego, ambos mantuvieron sus turnos de saques sin sobresaltos. En el quinto game, el joven danés revirtió un 0-40 y salvó cuatro puntos de quiebre. Posteriormente, los dos jugadores se hicieron fuertes con su servicio no cedieron oportunidades. Pero, en el undécimo juego, el argentino sacó toda su garra y energía para quebrar el saque del danés y, tras el descanso, selló el set a su favor por 7-5 en 1h07m.
Adentrado en el set decisivo, Marco Trungelliti golpeó primero: tras tres primero juegos en donde hubo break points, el argentino quebró el saque del danés y luego confirmó para imponerse por 4-2. Sin embargo, nada estaba terminado. Holger Rune reaccionó, recuperó y sostuvo para dar vuelta el score por 5-4. Seguidamente, el santiagueño tuvo un firme game de saque en 0 para igualar las acciones. En continuado, Marco con decisión concretó la ruptura y quedó de cara a cerrar el título. Pero estuvo 30-0 y Holger resurgió para llevar la final al tie break. Allí, el no. 237° ATP logró dos mini quiebres, entregó uno y se fue 4-2 al cambio de lado. A partir de allí todo fue para Rune que lo selló por 6-3. 5-7, 7-6(5) en 3h de partido y se coronó campeón por primera vez de un torneo Challenger.
