Los organizadores del US Open han manifestado que las ruedas de prensa que ofrecen los tenistas después de cada partido son extremadamente importantes. Por ello no cambiarán su carácter obligatorio. Algo que no hubiera sido noticia hace unos meses está en el ojo del huracán a causa del suceso ocurrido con Osaka en Roland Garros.
A pesar de la polémica y el debate generado tras la salida de Naomi Osaka de Roland Garros por negarse a hablar con la prensa, el US Open confirmó que la atención a los medios de comunicación será obligatoria.
“Que los jugadores estén disponibles para hablar con los medios es muy importante para nuestros fans. No hay ningún cambio en nuestras normas y serán aplicadas equitativamente a todos nuestros jugadores”, dijo en una rueda de prensa telefónica la directora del torneo, Stacey Allaster. “Pero sí hay flexibilidad en cuanto a la salud de los atletas”.
Esta declaración surge a días de que arranque el US Open y pese a anunciar que las normas del mismo no cambiarán, Allaster sí habló de la importancia de la salud mental de los tenistas de cara a sus comparecencias frente a los medios de comunicación.
“Ya lo hemos hecho en el pasado. Si alguien se ha lesionado el tobillo o no pueden ir a la rueda de prensa formal, hay una evaluación médica y los doctores tomarán una decisión“, dijo.
A su vez, también habló de la posibilidad en algún futuro de modificar el sistema de las ruedas de prensa por un formato menos formal o bien, que se realicen al día siguiente y no a minutos de haber terminado el partido.
Un US Open con pocas medidas de sanidad
Por otro lado, en cuanto a la contención del coronavirus, los organizadores señalaron que este año no buscan evitar que se produzcan contagios en el torneo. El objetivo es que no se produzca un brote considerable. Por ello, en esta ocasión, las normas son muy relajadas en comparación con las del año pasado.
Para esta edición no será obligatorio presentar una prueba negativa de covid-19 o un certificado de vacunación. A su vez, el público tampoco tendrá la obligación de usar mascarillas a las afueras de los estadios. Además tampoco se les tomará la temperatura a la entrada de los recintos.
Por otro lado, los tenistas no tendrán que permanecer en la burbuja como el año pasado. De esta manera podrán alojarse en hoteles diferentes a los oficiales, además de que tampoco estarán obligados a hacer cuarentena al llegar a Nueva York.