Llegó una de las sorpresas de la jornada en el Open de Australia con la caída de Coco Gauff sobre Qiang Wang por 4-6, 2-6 en hora y 13 minutos de juego.
Había muchas esperanzas puestas en la joven jugadora estadounidense que había hecho un inicio de temporada muy bueno siendo la única jugadora que había robado un set a la No.1 Ashleigh Barty, y unas semifinales durante la pasada semana donde su verdugo era Madison Keys.
Delante tenía una jugadora que pudo tener una gran época de tenis, pero que hace bastante tiempo estaba lejos de su mejor nivel. Este resultado puede que le de alas para poder ascender en su confianza. Gauff estuvo muy errática cometiendo cerca de 40 errores no forzados en un duelo que apenas duró la hora de partido. No se le pudo ver con esa intensidad de fondo y intercalándolo con esos golpes ganadores que suele crear.
La No.110 del mundo, salió a la cancha sin nada que perder y eso contribuyó en jugar con tranquilidad y mostrar su nivel de tenis. Cosechó el quiebre en el quinto juego del primer set y pese a que en el próximo juego la estadounidense tuviera bola de break, lo evitó y fue capaz de llegar hasta el desenlace con la diferencia.
Gauff se vino más abajo tras dirimirse esa primera manga. Wang se fue rápidamente hasta el 5-0 sirviendo para llevarse el partido. Una situación que seguramente ni en sus mejores sueños se podía haber imaginado. Obviamente, hubo una reacción de orgullo por parte de Coco que mostró una de sus mejores versiones del partido pero era demasiado tarde. Consiguió un quiebre, sacó adelante su servicio, y después tuvo un 15-40 para acercarse. Cometió errores, aunque en esta ocasión llevando su dificultad ya que Wang sumaba mucho también. La china, por su parte, fue capaz de sacar el partido adelante y dejar a un lado la épica que se podía percibir si la estadounidense de 17 años continuaba sumando. Qiang Wang prosigue a la segunda ronda del Open de Australia al batir a Gauff y se medirá a Alison Van Uytvanck.