El alemán, cuarto favorito del cuadro, pasó por encima del serbio en su primer partido del Masters 1000 de París-Bercy 2020. Con un doble 6-2 en 55 minutos, Zverev logró su acceso a los octavos de final donde ya le espera el francés Adrian Mannarino.
La racha de victorias de Alexander Zverev sigue su curso. El teutón amplió a nueve su número de triunfos consecutivos en el circuito tras despachar con mucha más facilidad de la prevista al serbio Miomir Kecmanovic en su primer encuentro en el Masters 1000 de París-Bercy. El número siete del mundo cedió solamente cuatro juegos (doble 6-2) en su estreno en la capital francesa, donde pasó por encima de un ausente Kecmanovic.
El único precedente, del lado del serbio
Kecmanovic, actual número 42 del ranking ATP y campeón este año en la arcilla de Kitzbühel, ya sabía lo que era vencer a todo un top10 como es Zverev. Lo hizo el pasado año en otro Masters 1000, Cincinnati, y en la segunda ronda, mismo escenario en el que se veían las caras en el día de hoy (6-7 6-2 y 6-4). Zverev, que nunca ha pasado de cuartos en este torneo, llegaba con la vitola de sus ocho victorias seguidas en Colonia, donde salió triunfador en los dos eventos 250 que albergó la ciudad alemana hace apenas unas semanas.
El de Hamburgo está cuajando un buen 2020, año en el que ha roto su particular maldición con los Grand Slams, llegando a semifinales en el Open de Australia y a la final del US Open. En ambas ocasiones cayó derrotado ante el austríaco Dominic Thiem, ausente este año en Bercy.
Paseo militar para Zverev
Con la presencia en la desangelada grada de su actual entrenador, el alicantino David Ferrer, Zverev salió en tromba, golpeando de manera muy limpia a la bola, tanto por el lado de su revés, el más fuerte, como por la derecha, históricamente su punto más débil. En un visto y no visto, el alemán se colocó con un contundente 4-1 que dejó el primer set visto para sentencia. Una vez más, el primer servicio fue clave para Zverev, que sólo perdió tres puntos en esta primera manga, 14 de 17. El alemán gestionó perfectamente su ventaja de doble break y en apenas 25 minutos puso el inapelable 6-2 en este primer set.
Kecmanovic no había existido durante el primer parcial… y tampoco en el segundo. Al serbio le quedó muy grande este encuentro y no mejoró su rendimiento con respecto al primer set, algo que tampoco era muy difícil. Dos quiebres más y Zverev endosó otro 6-2 a su rival para finiquitar un duelo extremadamente sencillo en solamente 55 minutos. El alemán se gustó en todo momento, finalizando con 33 golpes ganadores por 16 errores no forzados.
Tiene pinta que su siguiente oponente en Bercy no se lo pondrá tan fácil, puesto que será Adrian Mannarino, ante el que ya sufrió lo suyo hace un par de semanas en Colonia, el rival contra el que se jugará un puesto en los cuartos de final.