Por primera vez en su carrera deportiva, Jennifer Brady alcanzó los cuartos de final en un Grand Slam al poder vencer a una jugadora como Angelique Kerber.
Está siendo un año muy especial para la jugadora estadounidense, gozando de un excelso rendimiento. Ganó su primer título WTA después del parón en Lexington, y ahora le llega esta gran oportunidad. Aun así, recuerda su pasado y los momentos que pasó en 2017. «No estaba preparada física y mentalmente para que ese año pudiera hacer dos octavos de final de Grand Slam«. Alcanzó esa ronda tanto en el Open de Australia como en el US Open. Sin embargo, hasta esta semana, no ha vuelto a pisar esa ronda.
«Desde principio de esta temporada me siento como una jugadora diferente«, explicó la tenista. «No me estoy poniendo expectativas de cara a lo que pueda suceder, pero tampoco me sorprende el poder hacer un gran resultado en un torneo. Estoy muy feliz de alcanzar los cuartos de final, y con suerte, esto seguirá hacia delante«, dijo.
«Física y mentalmente me he puesto mucho más en forma. Soy capaz de mantener la misma intensidad desde el principio hasta el final. Por tanto, gozando de este físico, el apoyo mental también es más motivador«, comentó en rueda de prensa después de finalizar con el recorrido de Kerber. «El primer set jugué como lo había planteado, pero en el segundo, no fui tan agresiva y ella comenzó a meter muchas más bolas«. En su encuentro de cuartos de final, deberá verse las caras con Yulia Putintseva. Quién gané, jugará por primera vez unas semifinales de Grand Slam.