El combinado suizo no tuvo problemas para vencer al conjunto transalpino por 3-0. Tanto en el singles como en el dobles fueron superiores y sentenciaron la eliminatoria por la vía rápida.
Teichmann abre fuego con un triunfo agónico
La serie se abría con el triunfo suizo de Jil Teichmann en tres sets ante Elisabetta Cocciaretto en un partido que tuvo de todo. Ambas jugadoras mostraron un tenis muy sólido desde el fondo de pista, aunque Teichmann era la que iba llevando el control del encuentro gracias a su juego algo más directo. La primera manga fue para la helvética por 6-3, y parecía que todo iba sobre ruedas. Cocciaretto no se rindió y logró sacar adelante un segundo set en donde llegó a ir break abajo, pero supo aprovecharse de los errores de Jil para llevarse el segundo parcial. La italiana estuvo rayando a un nivel muy alto durante casi todo el tercer set, llegando a tener pelota de partido a su favor pero siendo incapaz de aprovecharla. El tie-break dictó sentencia, y finalmente fue Teichmann la que se acabó imponiendo tras más de tres horas de partido.
Bencic certifica el trinufo suizo
Suiza saltaba a la pista con la intención de certificar la eliminatoria en el segundo punto. Belinda Bencic y Jasmine Paolini se medían en busca de un triunfo vital para ambas selecciones. Las cosas comenzaron de la mejor manera para el combinado helvético gracias al buen hacer de Belinda al comienzo del encuentro. La número 1 suiza fue marcando el terreno a lo largo del partido gracias a su mayor poder ofensivo ante una Paolini que no encontraba la manera de frenar el juego agresivo de su rival al otro lado de la red. El segundo set vivió la misma historia que el primero, y finalmente Suiza logró cerrar el primer envite de la fase de grupos ante el cuadro transalpino para comenzar la competición con el pie derecho.
Suiza remata en el dobles
El encuentro de dobles servía para cerrar una eliminatoria que ya estaba resuelta. Bencic y Teichmann saltaban a pista para medirse ante Paolini y Trevisan, y rápidamente las suizas no tardaron en desplegar su superioridad. Tras un primer set bastante igualado, las helvéticas remataron la faena en el tie-break y de esta forma lograron abrir brecha en el encuentro. El segundo parcial estuvo controlado en todo momento por el equipo suizo gracias a la mayor sintonía de las helvéticas en la red. Un claro 6-1 en favor de las suizas puso punto y final a una eliminatoria que sólo tuvo un color en la pista de Glasgow, y ese fue el color suizo.