Alexander Zverev derrota a Jannik Sinner (5-7, 6-3, 7-6(5)) en 3 horas y 7 minutos, en los cuartos del Masters 1000 de Montecarlo. El alemán se hace con uno de los mejores partidos de 2022, y se enfrentará a Tsitsipas o Schwartzman por un puesto en su primera final de Mónaco.
Alexander Zverev y Jannik Sinner se encontraban en las semifinales del Masters 1000 de Montecarlo 2022, en el que suponía el cuarto enfrentamiento entre alemán e italiano. Alexander, número 3 del mundo, y acechando el número 2 de Medvedev, que conseguiría ganando en Montecarlo, había ganado a Sinner en Colonia 2020 y en el US Open 2021, mientras que Jannik se había llevado el primer enfrentamiento en Roland Garros 2020.
El segundo preclasificado del torneo, Zverev, llegaba a cuartos con triunfos ante Federico Delbonis y Pablo Carreño, sin ceder sets. Con muchas más complicaciones, Sinner había ganado a Coric, Ruusuvuori y Rublev, en un encuentro en el que el transalpino volvió a sufrir con las ampollas que le retiraron de Miami.
Sinner, con la épica
Desde el comienzo del partido, pudo observarse cómo estábamos ante uno de los grandes encuentros de esta gira de tierra. En un partido de duros golpes de fondo, la igualdad sería el denominador común en todo momento. Ya en el primer set, Zverev comenzaría con ventaja de 4-1, pero, sacando por debajo de su habitual, cedería dos quiebres para que Sinner se llevara la primera manga por 7-5.
En el segundo set, Sinner rompería primero, haciendo parecer que podía cerrar el partido en dos sets, pero nada más lejos de la realidad: el italiano entregaría dos juegos con su servicio, haciendo que Zverev sentenciara con el suyo por 6-3.
En el tercero, el partido alcanzaría su clímax, con un tenis de absoluta calidad, y un público entregado al juego de Jannik Sinner. Este fue un parcial muy cambiante, Sascha comenzaría con un break que Sinner recuperaría ipso facto para igualar a 2. Con 3-3, Zverev volvería a quebrar, pero, sacando para partido con 5-4, en un intenso juego, Sinner recuperaría. Una vez más, Jannik salvaría pelota de quiebre, y pondría un 6-5 que Zverev neutralizaría para que el encuentro se decidiera en el tiebreak. En él, tras muchos minibreaks, Zverev se llevaría el gato al agua en un tenso final por 7-5.