Mariano Puerta, quien fuera finalista de Roland Garros en 2005 y cerca de una década sancionado por dopaje, se sumará al equipo de Cristian Garín en 2022. Polémica decisión la tomada por el chileno, que buscará la ayuda del argentino para recuperar el gran nivel que ofreció en tramos de 2019 y 2020, y del que se ha alejado con creces en 2021.
Son tiempos de renovación para Cristian Garín. El chileno ha visto rotundamente fracasada su etapa junto a Franco Davin, en la que no ha podido destacar durante 2021 fuera de la tierra batida. Incluso en la tierra ha empeorado sus resultados. Como consecuencia, en septiembre despidió al entrenador argentino, para cambiarlo por otro argentino, que se estrena en el entrenamiento de élite. Ese es Mariano Puerta, más que conocido por su polémico subcampeonato de Roland Garros en 2005.
El que fuera la primera víctima en una final parisina para Rafa Nadal llegó a ser número 9 del mundo, y fue sancionado dos veces en su carrera por dopaje. En 2005, dando positivo en etilefrina, y siendo inicialmente castigado a ocho años sin jugar al tenis profesional. Finalmente, el asunto quedó en año y medio hasta que regresó a las pistas para jugar el circuito Challenger. Nunca más volvería a jugar un cuadro final a nivel ATP o Grand Slam.
Garín, a quedarse con lo bueno de Puerta
Pese a todos estos malos antecedentes, Cristian Garín ha decidido apostar por Mariano Puerta para arrancar junto a él la temporada 2022. El sudamericano de 43 años, con doping o sin él, tendrá la capacidad de aportarle mucho en lo que a tierra batida se refiere. Probablemente, alcanzar un nivel alto en canchas rápidas no sea fácil para el chileno, ni con Puerta ni con otro. Sea como fuere, empezarán a trabajar juntos a partir del próximo mes de diciembre.
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