Tras lograr su acceso a la final del ATP 500 de Acapulco, el tenista español confesó en sala de prensa sentirse más liberado al sentir que su maltrecho pie izquierdo le sigue dando tregua en este gran inicio de temporada.
Un mes después de su épico encuentro en la final del Open de Australia, Rafael Nadal y Daniil Medvedev volvieron a verse las caras, en este caso, en la semifinal del ATP 500 de Acapulco. Y al igual que en Melbourne y en cinco de las seis ocasiones en las que ambos se han medido hasta la fecha, el ganador fue el español, que ejerció nuevamente de verdugo del ruso al derrotarlo por un doble 6-3.
Tras lograr el pase a una nueva final, la tercera del año y la quinta en el torneo mexicano, Nadal valoró en declaraciones lo que significa para él esta nueva oportunidad de luchar por otro título ATP, reconociendo su satisfacción al comprobar que ese pie izquierdo continúa aguantando en este excepcional inicio de temporada en el que todavía no conoce la derrota (14-0).
El resumen del partido
“Cada partido es distinto, ya lo dije en Australia. El segundo set ha sido muy emocionante, con puntos increíbles. En el primero él ha intentado jugar más agresivo de lo habitual y yo he estado bien, con pocos errores y muy bien tácticamente. Ha sido mi mejor día con el saque. A partir del break que le hice de entrada, se puso a jugar sin errores, con dejadas, y tuve que salvar once puntos de break. En eso hay que darle mérito a él. Los salvé porque jugué muy bien, los dos acertamos mucho y fue un momento de mucho nivel tenístico en el que me pude escapar“.
Una nueva final en Acapulco
“Para mí es una victoria de mucho nivel que me ayuda y que confirma que las cosas están yendo de manera muy positiva. Jugar la final aquí en Acapulco, en un torneo importante y para mí muy especial, significa mucho“.
Continúa la tendencia al alza en 2022
“Es un partido importante, contra el rival que es el número uno del mundo ahora mismo, en una superficie que le favorece, aunque en esta pista el bote es más alegre y eso me viene bien. Mantengo la calma y veo las cosas de una manera muy tranquila. Es evidente que estar en la final después de esfuerzo de Australia, adaptarme a unas condiciones diferentes y mantener la concentración, demuestra que estoy mentalmente bien, con ilusión y con la mentalidad adecuada antes de una final contra un rival (Cameron Norrie) que viene de ganar un torneo“.
Agradecido por su carrera
“Mi carrera ha sido larga y mucho más exitosa de lo que hubiera podido imaginar. Estar aquí jugando es un regalo para mí. Valoro mucho todo. Solo puedo estar agradecido a la vida por todas las experiencias que he podido tener, por lo que estoy viviendo y por todo lo bueno que me pasa“.
El pie le da una tregua
“Tengo un problema que no tiene solución, y tengo días mejores y peores, con más o menos dolor, pero lo estoy manejando. Estoy pudiendo jugar sin limitaciones, lo que no podía hacer durante el último año y medio. Jugaba con demasiado dolor y problemas. Así era muy difícil competir“.
“Ahora me siento un pelín liberado, porque de momento en todos los partidos que he jugado el pie izquierdo no ha sido un problema. Aunque soy consciente de que no sé lo que puede pasar, aunque estoy disfrutando cada día que el pie me permite jugar con libertad y dar todo lo que tengo y buscar los mejores resultados posibles“.
Como ya comentó el propio Nadal en sala de prensa, su rival por el título será el británico Cameron Norrie, sexto favorito del cuadro, que en la primera semifinal doblegó al griego Stefanos Tsitsipas por un doble 6-4. Norrie y Nadal se han visto las caras anteriormente hasta en tres ocasiones, todas ellas en 2021 (Open de Australia 3ªronda, Conde de Godó cuartos de final y Roland Garros 3ª ronda) y todas con triunfo para el balear. La final tendrá lugar esta madrugada no antes de las 04:00 hora española (21:00 hora local).