El tenista estadounidense ha dejado fuera de combate a Medvedev. Korda ha brillado con luz propia con un partido para rememorar (7-6(7), 6-3, 7-6(4) y así deja fuera al doble último finalista del Open de Australia.
Partido de altos vuelos el que enfrentaba a Medvedev contra Korda y uno de los dos solamente podía estar en los octavos de final. El estadounidense venía de superar a Garín y Watanuki, mientras que el ruso había hecho lo mismo con Giron y Millman. En el cara a cara un enfrentamiento previo en París Bercy 2021 y la victoria fue para Medvedev en tres mangas.
Un primer set para el recuerdo
El primer set fue una auténtica oda al tenis que duró una hora y veintiséis minutos. Un nivel de tenis altísimo, con largos intercambios, con puntos que levantaban al público y con dos jugadores que pasan por un gran momento de confianza. Korda fue el primero en escaparse en el marcador hasta el 4-1. A pesar de la igualdad en los juegos el joven estadounidense estaba más inspirado en los puntos importantes y lograba tener ventaja. En cambio Medvedev no se rindió y después de tres juegos consecutivos a base de pundonor ponía el 4-4.
Korda reaccionaba otra vez con una rotura y ponía el 5-4 y se quedaba con el servicio para cerrar la primera manga. Medvedev tiró de experiencia y tras dos juegos consecutivos con el 6-5 como mínimo se aseguraba el tie break. Finalmente se fueron a la muerte súbita y aquí Korda muy valiente dispuso de tres bolas de set. Le costó, pero a la tercera por 9-7 lograba llevarse un primer set que deleitó al mundo del tenis.
Sebastian Korda da la sorpresa
Korda salió igual de enchufado en la segunda manga. Rápidamente era capaz de escaparse hasta el 3-0. Medvedev tenía que reaccionar sí o sí. En cambio al ruso no se le veía ni nervioso ni quejándose consigo mismo. Daniil siguió peleando y poco a poco fue mejorando las sensaciones con el servicio. En cambio al resto no encontraba las alternativas de break y por este motivo Korda por 6-3 sellaba también el segundo set y hacía saltar todas las alarmas en Medvedev, ya que era el último finalista de las dos últimas ediciones del torneo.
Korda no bajaba el nivel y volvía a empezar de la mejor manera en el tercer parcial gracias a un break en blanco y su confirmación se ponía con el 2-0. Solamente cuatro juegos le separaban de uno de los mejores triunfos en su carrera. Medvedev empezaba a desesperarse y es que no podía con la velocidad de bola y los golpes ganadores de su rival. Desde ese momento el ruso ganó los juegos con servicio con mayor facilidad y pasaba la patata caliente al otro lado de la red.
Parecía tranquilo Korda con el 40-15 en el octavo juego, pero Medvedev tiró de garra y después de cuatro puntos consecutivos ponía el 4-4. Juego clave el noveno para el devenir del encuentro. Daniil lo ganaba en blanco y de repente restaba para ganar el set. No volvieron los nervios en Korda y se iban al tie break tras dos grandes voleas del estadounidense. Korda jugó valiente y con personalidad para escaparse hasta el 4-0 y Medvedev volvía a estar contra las cuerdas. Con el 6-1 después de dos puntos espectaculares Korda tenía cinco bolas de partido. Salvaba tres bolas de partido Medvedev, pero a la cuarta un winner de derecha le daba a Korda un triunfo memorable y que seguro no olvidará.