Las nuevas reglas empiezan a llegar a los torneos. En 2018 los Grand Slam acogerán los primeros cambios, tras las pruebas que se hicieron en las Next Gen ATP. Con estas normas se intentará llegar a más público, con el objetivo de innovar en este deporte.
La Federación Internacional de Tenis ha hecho públicos los cambios previstos en 2018 para los cuatro grandes torneos del tenis mundial – Australian Open, Roland Garros, Wimbledon y US Open -. La decisión se ha tomado en consenso con los máximos responsables de los Grand Slams. También se han alcanzado acuerdos en cambiar el sistema de cabezas de serie, pero eso será a partir de 2019.
Reloj en pista
Lo que ya se verá a partir del primer grande de la temporada, el Australian Open en enero. Será un cronómetro en pista que controlará que los tenistas no excedan los 25 segundos entre un punto y otro. Estuvo en pruebas en la fase previa del último Abierto de Estados Unidos, pero empezará a ser oficial ya desde enero.
Menor tiempo de calentamiento
Además del tiempo entre puntos, también se pretenden acortar los calentamientos. Por ello, a partir del año que viene, no podrán durar más de siete minutos en total – uno para dirigirse a la red por el sorteo de campo, cinco para el peloteo entre jugadores y ponerse a punto físicamente, y otro más para empezar el encuentro-. Desde los torneos pretenden ser rígidos con esta medida. El que se exceda de ese tiempo, tendrá una multa de unos 17.000 euros – 20.000 dólares-.
Devolución de dinero en caso de lesión
Otro apartado en el que los peces gordos del tenis mundial van a poner el foco es en los partidos de primera ronda de los grandes torneos. Muchas veces, los jugadores llegan a estas citas lesionados y, para no perder el dinero que les dan de premio por disputar el encuentro, hacen el esfuerzo o cubren el expediente compareciendo sin esforzarse y perdiendo fácil. Para evitar estas triquiñuelas, la organización del torneo obligaría al jugador a devolver el dinero recibido, en caso de apreciar conductas irregulares. Además, en caso de retirada de un jugador antes de jugar su primer partido, solo recibirá la mitad del dinero. La otra se la quedaría el tenista que ocupe su plaza.
Menos cabezas de serie
Hay otra medida que afecta a los emparejamientos de los Grand Slams, pero que se verá a partir de 2019. Hablamos del número de cabezas de serie, que se reducirá a la mitad, pasando de los 32 actuales a los 16 que habrá entonces.