Pablo Carreño derrota a Roberto Bautista (6-4, 6-3, 5-7 y 6-4) y jugará de nuevo los octavos de final de Roland Garros. El asturiano supo imponerse en los puntos largos a un Bautista más desquiciado de lo normal, y se medirá el próximo lunes a Daniel Altmaier, para buscar unos cuartos de final ante Novak Djokovic.
Pablo Carreño y Roberto Bautista. Dos grandes amigos, y conocidos en pista. El de los dieciseisavos de Roland Garros sería su quinto enfrentamiento, y los dos que había ganado Bautista habían sido, uno en Grand Slam y otro en tierra batida. Los dos partidos que jugaron en pista dura a 3 sets se los llevó Carreño. Estos datos hacían pensar que destacar un favorito sería casi imposible para este partido.
Ambos se presentaban en esta tercera ronda sin haber cedido sets. Carreño estuvo brillante ante John Millman y Guido Pella; mientras que Roberto jugó un tenis impecable ante Richard Gasquet y Attila Balazs.
En ciernes, un grandísimo partido de españoles en Roland Garros.
Carreño fue más listo
El partido comenzaba con juegos largos, dándonos pistas de lo que podía ser el partido (más corto de lo esperado al final). En el primer set, Bautista golpeaba primero, rompiendo el saque de Carreño con 1-0, pero el asturiano se repondría, y rompería dos veces después a un descentrado Bautista para ganar el primer set por 6-4.
En el segundo, Roberto demostraba que no estaba del todo bien mentalmente (cosa rara en él). Afectado por la pérdida del primer set, Bautista era roto en el primer juego del segundo, y, Carreño, a lo suyo, iría sacando sus saques con comodidad, hasta volver a romper en el último juego de la segunda manga, que se llevaba Pablo por 6-3. El asturiano no cedía bolas de break en todo el parcial, y se colocaba con una muy buena ventaja para acabar llevándose el partido.
En el tercero cambiarían las cosas. Si bien Roberto mostró ciertos gestos de frustración poco habituales en él (llegó a tirar la raqueta), el valenciano estaba en el partido. Conseguía romper el saque de Pablo con 1-1 y, aunque Carreño conseguiría el contrabreak con 3-4, el de Gijón cedería con 5-5 de nuevo, y Bautista cerraba por 7-5 el tercer set con su saque. Comenzaba un nuevo partido, con Roberto ya en la pista.
Pero el tercer set acabaría por ser un espejismo. Bautista conseguía colocarse en el cuarto 4-2 arriba, pero su cabeza no estaba al máximo, y menos su tenis, desbordado por momentos. Carreño encadenaba dos breaks seguidos, para cerrar el partido con un 6-4 final.
Daniel Atlmaier: ¿es realmente un caramelo?
El alemán Daniel Atlmaier será el siguiente rival de Pablo Carreño. Su desempeño en este Roland Garros es casi inexplicable: se ha metido en los octavos siendo su primer Grand Slam, y sin ceder ningún set por el camino. El alemán ha empezado a dar miedo, y se ha cargado camino de los octavos a Feliciano López, Jan-Lennard Struff y Matteo Berrettini, tres grandes jugadores. Carreño no debe menospreciar al de Kempen, porque ha dado motivos para todo lo contrario durante la primera semana.
En los cuartos, podría enfrentarse a Novak Djokovic, si este gana antes a Daniel Galán, que debería, y a Garín o Khachanov en octavos, que serán más difíciles. Carreño parece ser el único capaz de hacerle partido a Djokovic antes de la semifinal, y podría volver a ganar al serbio en su superficie predilecta.
Veremos cómo transcurren las siguientes rondas, pero, de momento, Carreño, con muy buen tenis, está en los octavos de Roland Garros 2020.