Australia evitó la eliminación directa tras remontar la serie ante Hungría, en las Finales de la Copa Davis. El equipo capitaneado por el ídolo Lleyton Hewitt, tuvo que recurrir a una trabajada victoria de De Miñaur, y lo propio en el dobles, para permanecer con vida en la competencia y esperar resultados posteriores.
Piros da el golpe inicial
Interesante primer duelo de la serie, entre un joven habitué del circuito Challenger como Zsombor Piros y un experimentado como John Millman. El duelo comenzó de manera favorable al oceánico, como se especulaba en la previa, con un 6-4 inicial para el aussie. Pero las cosas iban a cambiar radicalmente con un Piros cada vez más combativo en el partido, haciendo todo muy parejo. El húngaro se llevó la segunda manga por otro 6-4 y se disponía a batallar en el tercero. Todo se iba a definir por detalles, y un quiebre clave para el europeo acabaría dándole la victoria a Hungría en tres mangas.
De Miñaur mantiene con vida a los aussies
Australia necesitaba de una victoria con obligación, y para ello salía a la cancha su mejor raqueta, Alex De Miñaur, enfrentando al mejor húngaro, Marton Fucsovics. Notable ritmo en ese primer set, entre dos jugadores que entendían bien lo que se estaban jugando para sus países. El australiano comenzó set arriba al llevárselo por 7-5, pero Fucsovics igualaba la historia con un contundente 6-2 en el segundo, que ilusionaba de cara a la definición. Finalmente, en un ajustado tiebreak, el triunfo quedó para De Miñaur.
El dobles sella la victoria australiana
Todo se iba a definir en un tercer partido. La dupla australiana era compuesta por el especialista John Peers y el novato Alex Bolt, frente a una dupla joven con Fabian Marozsan y nuevamente Zsombor Piros. Los dirigidos por Hewitt parecían traer mayor experiencia en esta clase de partidos, y así lo iban a demostrar al llevarse el primer set por 6-3. El segundo parcial sería una lucha palmo a palmo, que acabaría en un tiebreak, con set points y match points por doquier. Los húngaros resistieron y estiraron el final hasta un tercer parcial. Pero nuevamente allí iba a prevalecer el tenis de los australianos, cerrando el partido con un 6-3, y adueñándose de la serie.