El español debió batallar más de tres horas para vencer al japonés Yasutaka Uchiyama (4-6, 6-3, 1-6, 6-3, 6-3) y así acceder a la segunda ronda en Nueva York. Su próximo rival será el estadounidense Mitchell Krueger, con el que no tiene antecedentes en su historial.
Pablo Carreño era el gran favorito ante Uchiyama en su debut del US Open. El asturiano venía de superar a Lajovic en Cincinnati y caer luego ante el ruso Khachanov. Sus actuaciones y el ranking hacían pensar que era el que tenía más papeletas para llevarse el duelo. El asiático en cambio es un jugador muy versátil con muchas piernas y una dura roca desde el fondo de la pista. Uchiyama en Cincinnati superó en sets corridos a Pablo Cuevas y luego cayó contra el lituano Berankins.
Mal inicio de Carreño
El asturiano comenzó errático y era su rival que le dominaba con fuertes golpes desde el fondo de la pista. Carreño dispuso primero de dos bolas de break pero no aprovechó ninguna. Así el marcador estaba empatado a dos juegos. En cambio en el siguiente juego Uchiyama si golpeó el servicio de Carreño y consiguió el primer break del partido para tomar ventaja. El japonés iba a más y Carreño muy fallón no encontraba su juego. Una y otra vez se veía dominado. A pesar de salvar dos bolas de set con el saque en el noveno juego, acabó cediendo en el décimo game la primera manga por un 6-4.
Carreño reacciona
Lo peor no era el resultado, si no las sensaciones. Su juego no estaba siendo ese tenis sólido que le había llevado a ser semifinalista en 2017 en este Grand Slam. Sufriendo se llevó el primer juego del segundo set que le hacían ganar confianza. En el segundo juego tenía Pablo las dos primeros opciones de break, en cambio salvó las dos, la segunda con el vigésimo golpe ganador de Uchiyama. Al final en un igualado juego Carreño sumó el primer break a su favor para abrir distancia en el marcador. Sin acabar de convencer pero las sensaciones seguían mejorando después de ganar el tercer juego consecutivo. El partido había cambiado la dinámica y Carreño empezaba a mandar en la pista. A los 46 minutos el parcial caía para Carreño por un 6-3 para igualar la balanza.
Nuevo colapso
Otra vez llegaron esos errores que le hacían perder confianza en su tenis. Pablo jugó un mal set y es que Uchiyama volvió a conector esos tiros que le hacían llevar la iniciativa. Únicamente un juego pudo hacer el español ante el vendaval del japonés que en tan solo 25 minutos ponía un contundente 6-1 en el marcador para quedarse a un set de dar una de las sorpresas en la primera jornada. Pablo volvía a sentir mal la bola con muchos errores, pero debía reaccionar si quería seguir con opciones en el US Open.
Al quinto set
El cuarto set era clave. Pablo debía ganar sí o sí y forzar el parcial definitivo. Al igual que después de perder el primer parcial comenzó bien y a los poco minutos tenía un 3-0 a su favor. Ni una sola bola de break concedió en todo el cuarto set dejando claro que seguía con ganas de conseguir la remontada. Con el paso de los minutos acabó cerrando el punto y mirando a su equipo tras forzar el quinto y definitivo set que iba a decidir al ganador del encuentro.
La diferencia justa
El español comenzó el set definitorio de la mejor manera posible, con un break en el primer juego. Y luego lograría salir ileso de cuatro puntos de quiebre en contra, al siguiente game. Hecho fundamental para marcar una diferencia a favor en el score. Carreño logró mantener sus juegos de servicio sin problemas y concluyó llevándose el partido tras cinco sets.