El tenista argentino Diego Schwartzman derrotó al australiano Alexei Popyrin por 7-6(5), 7-5, 7-6(6) tras 3h42m en la segunda ronda del US Open. El No. 16 del mundo se medirá con Frances Tiafoe o Jason Kubler en la tercera rueda.
Diego Schwartzman puede complicar a cualquiera en el circuito, aunque también puede caer con jugadores de menor nivel. De todos modos, el argentino tiene un don competitivo único. En esta temporada, tuvo buenas y malas semanas, pero se mantiene en el Top 20. Si bien aún no levantó títulos, llegó a la final del ATP 250 de Buenos Aires y del ATP 500 de Río de Janeiro. Además, hizo semifinales en el Córdoba Open y en el Conde de Godó. En sus últimas presentaciones, cayó en la segunda rueda de Montreal y en tercera de Cincinnati. Ya en el US Open, eliminó a Jack Sock.
Alexei Popyrin no pudo sostener en esta temporada lo hecho en la pasada, en la que consiguió su mejor ranking, aunque se sostiene en el Top 100. En este 2022, el australiano se quedó con el Challenger de Bourdeaux, como su semana más destacada. Además, hizo final en Nottingham e Ilkley. En sus últimas semanas, el No. 84 del mundo cayó en la ronda final de qualy de Montreal y en la primera rueda de clasificación de Cincinnati. Ya en el US Open, venció a Chun-Hsin Tseng.
Schwartzman saca adelante un complicado partido
En el primer set ambos se aferraron a su saque para llevar adelante el partido. Los dos generaron innumerables cantidades de break points, pero no las concretaron. Con paridad en los números, todo se fue al tie break. Allí, Diego Schwartzman aprovechó los errores de su rival, le tiró la devolución y se lo llevó por 7-6(3) en 1h20m.
En el arranque de la segunda manga ambos rompieron el saque para un comienzo frenético. Posteriormente, supieron escapar en cada game salvando break points, pero se empezaba a notar mucho mejor al argentino. Por su parte, Alexei Popyrin se sostenía con su enorme servicio y su garra. Luego de siete juegos en los cuales se impusieron los sacadores, el Peque soltó la devolución, sacó de foco a su rival y se llevó el 7-5 en 1h12m.
Ya en la tercera manga, el australiano comenzó a mostrar una cierta merma física, y Diego lo aprovechó para moverlo, quebrarle el saque y encaminar el partido. Sin embargo, Alexei siguió agarrado a su espiritu guerrero y se dispuso a generarle problemas al argentino. Luego de que el No. 84 del mundo recuperara, todo siguió parejo y llevaron la batalla a un nuevo tie break. Allí, Popyrin jugó de manera impecable y tuvo set point, pero Schwartzman sacó la jerarquía a la cancha para llevarse una muy dura faena por 7-6(5), 7-5, 7-6(6) tras 3h42m.