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Mannarino elimina al campeón Rublev en ATP Moscú

Rublev Mannarino ATP Moscú
Mannarino elimina a Rublev. Foto: ATP

El tenista francés Adrian Mannarino consiguió eliminar a la primera espada Andrey Rublev en el ATP 250 de Moscú mediante un 5-7, 7-6(4), 6-3 en dos horas y 27 minutos de duración. Se enfrentará a Ricardas Berankis por un puesto en las semifinales.

La que fuera la última final en este escenario, dos años después ya que en el 2020 no se pudo llevar a cabo, iba a ser un duelo de segunda ronda. Para el jugador ruso que llegaba como principal cabeza de serie, se medía al oponente con el que se había enfrentado la última vez. El francés, sin embargo, ya venía de competir su partido de primera ronda remontando a Roman Safiullin un set en contra.

Los servicios fueron primordiales en ese inicio de partido sin que ninguno de los dos rasgara mucho. Rublev con su potencia y Mannarino mediante la colocación. El primero en abrir la lata de los quiebres fue el jugador ruso lográndolo a la tercera. Con esa diferencia llegó hasta el 5-3 y servicio. No ayudaron mucho los primeros y Mannarino supo meter mucha presión al resto. Juego duro en el que el primer cabeza de serie comenzó a desesperarse y su estado corporal iba perdiendo rédito de cómo había ido el set anteriormente.

Fue a la quinta bola de break cuando lo consiguió y después tuvo una bola de quiebre que no pudo cosechar. Sin embargo, con ese 5-6, el No.6 del mundo logró esa primera bola de parcial. Mannarino, por su parte no iba a descender sus credenciales y tenía a Andrey muy obligado en tener que ascender el nivel. Hasta en dos ocasiones fue por delante el galo hasta llegar a esas situaciones de mayor firmeza. El francés se encontraba muy sólido y con confianza teniendo que salvar una bola de partido para que acto seguido, situar la muerte súbita. Un tie-break que Adrian comenzó a dominarlo desde el inicio y que desesperó muchísimo al jugador ruso.

Una bola de quiebre fue suficiente para que Mannarino abriera diferencias en el tercer parcial. El estado corporal era muy diferente por parte de ambas raquetas, mientras el público tenía que hacer acto de presencia para poder ir animando a su compatriota ya que se situaba con muchos problemas psicológicos. El francés se mantuvo muy tranquilo y optó por decisiones muy correctas para poder cerrar el envite a la primera bola de partido que dispuso. Era su choque 50 ante un Top-10 y es la séptima victoria que posee.

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