La jugadora local ha sacado su mejor versión para eliminar a Rybakina. Pegula ha sido muy superior y ha tenido el partido dominado desde el principio hasta el final (6-3, 6-4).
Partido a priori igualado y atractivo el que iban a disputar Pegula y Rybakina. La estadounidense venía de ganar por la vía rápida a Stephens y la kazaja había hecho lo mismo con Ruse. Entre ambas no había ningún precedente y solo una de ellas podía clasificar a los octavos de final del tercer WTA 1000 de la temporada.
Pegula salió muy acertada y sólida desde el fondo de la pista. Rybakina por su parte con su tenis agresivo no encontró esos tiros profundos y golpes ganadores que le hacen coger confianza en su tenis. Por este motivo rápidamente el marcador se decantó a favor de la estadounidense por un contundente 4-0. La kazaja intentó reaccionar y sumó dos juegos consecutivos para poner el 4-2 y apretar algo el marcador. En cambio Pegula no bajó el ritmo y finalmente pudo sentenciar la primera manga por 6-3. La tenista local estaba demostrando por qué se le dan tan bien este tipo de pistas y es que a este nivel puede ser una de las candidatas a llegar a las rondas finales.
No podían comenzar mejor las cosas para Pegula que con el 2-0 veía como estaba más cerca de clasificar a la siguiente ronda. La kazaja no estaba acertada y mucho tenía que cambiar el partido sí quería acabar ganando. No hubo ninguna alternativa más en cuanto a bolas de break en el segundo parcial. El momento clave llegó el décimo juego, cuando Pegula sacaba para cerrar el duelo. A la segunda bola de partido la jugadora local cerraba el puño y confirmaba su victoria para seguir con esperanza en el WTA Miami tras eliminar a una jugadora que a priori era candidata a llegar más lejos en el cuadro.