El tenista francés valoró sus opciones de cara a seguir jugando en un futuro a corto plazo, con la mente puesta en volver el año que viene a Roland Garros.
Monfils confía en volver a su querido Roland Garros en 2026
Pese a caer en la segunda ronda frente a Jack Draper, actual número cinco del mundo, Gael Monfils no cerró la puerta a regresar en 2026 a Roland Garros, escenario del segundo Grand Slam de la temporada. Precisamente, el extraordinario rendimiento que ofreció el jugador galo en su duelo ante el británico, cayendo por 7-5 en la cuarta manga, le sigue dando motivos de sobra para alargar su carrera y estar presente en el torneo parisino el próximo año.
En declaraciones recogidas por Espn Deportes, el veterano tenista de 38 años dejó una interesante reflexión acerca de cuál es el momento idóneo para colgar la raqueta, poniendo como ejemplos a sus compatriotas Tsonga, Richard Gasquet o Simon, todos ellos obligados a poner fin a sus respectivas carreras porque sus cuerpos ya no aceptaban la exigencia del deporte de élite.
Hay Monfils para rato
“Sé que voy a jugar el próximo año, pase lo que pase. Honestamente, por la forma en la que me sentí físicamente el tiempo que estuve en cancha, no diría que fue mi último Roland Garros. El tema está en mi cabeza, depende más de lo que yo quiera hacer, qué sacrificios estoy dispuesto a hacer“.
Difícil elegir cuándo parar
“Hay algo que me estoy preguntando y que lo encontré mirando a Jo (Wilfried-Tsonga) y sobre todo a Richard (Gasquet). Creo que es realmente difícil dejar de jugar Roland Garros. Es difícil porque cuando paras es porque ya no tienes el nivel suficiente para continuar jugando. Ambos jugaron fantástico en su último partido. Hay que sacarse el sombrero con ambos, incluso con Gilles (Simon)“.
Un partido que motiva a seguir
“Jugué un gran partido contra el número cinco del mundo, le jugué de igual a igual. Físicamente, si trabajo voy a estar bien, la verdadera pregunta es realmente qué quiero hacer en mi vida. Quizás al final del año diga: ‘Esto es todo, se acabó’, ¿quién sabe?“.