La japonesa Naomi Osaka no encontró soluciones contra la alemana Mertens y perdió en la segunda fase del WTA de Toronto. La asiática no pudo manifestar lo que había ejecutado en la ronda previa.
Osaka fue superada en Toronto
La ex número uno del mundo, Naomi Osaka (95°), sorprendió con su tenis en la primera ronda del WTA 1000 de Toronto despachando a la tunecina Ons Jabeur. Con su formidable triunfo ante la número dieciséis del ranking, la japonesa llegaba con buen nivel a la segunda instancia. En busca de los octavos de final, Osaka se enfrentaba con la alemana Elise Mertens (35°), otra tenista de buenas características. Esta última venía de derrotar a la estadounidense Volynet en sets corridos. La cuatro veces campeona de Grand Slam no ha destacado en ningún escenario en lo que va de la temporada 2024, aunque ha logrado tener episodios positivos. Más allá de eso, la asiática es una amenaza para cualquier tenista del circuito femenino, ya que está respaldada por grandes títulos.
Mertens jugó sus cartas en el primer set
El primer juego de la contienda se tornó demasiado extenso, la alemana tuvo que trabajar varios puntos adicionales para retener el servicio. Luego, Mertens se plantó en el fondo para soltar devoluciones efectivas y se quedó con un quiebre rápido tras un fallo de su rival. Sin embargo, Osaka no tuvo piedad en el tercer game, jugó con mucha agresividad y recuperó el break. Los intercambios eran extensos, ambas tenistas se mostraron firmes en la línea de fondo, estaban dispuestas a luchar. La japonesa trataba de presionar desde la devolución, buscaba incomodar a la alemana. De todos modos, Mertens se hizo fuerte en la recepción, neutralizó el juego de Osaka y quebró en el octavo game. Después, Elise se alió con su buen servicio para sellar la primera manga por 6-3.
La alemana no dejó que su rival se imponga en el juego
El segundo parcial se tumbó rápidamente del lado de la alemana que distribuyó bien la pelota para generar el error en su rival y le rompió el saque. Osaka se desesperaba al no poder sobrepasar a Mertens, quería arriesgar tiros profundos, pero acumulaba fallos. Elise jugaba cada punto con determinación y no daba lugar para que Osaka tome la iniciativa. Por su lado, la ex número uno del mundo aguantaba en los turnos de saque para seguir de cerca a la alemana. En el sexto game, Naomi fortaleció su juego en el fondo, controló los tiros e igualó las cifras. De igual manera, Mertens volvió a tomar el mando en el desarrollo del partido, se abalanzó sobre la pelota y concretó otra ruptura. La tenista alemana le cerró todos los espacios a Naomi y se terminó quedando con el triunfo tras un 6-4 final.