El ex tenista chileno charló para la ATP donde reveló las sensaciones de su pupilo, el austríaco Dominic Thiem, de cara a la inminente vuelta a la competición en el circuito masculino que se producirá la semana que viene en el Masters 1000 de Cincinnati.
El regreso del tenis en el circuito masculino es inminente. Pese a todos los problemas generados por la pandemia del coronavirus, el Masters 1000 de Cincinnati y el US Open serán los dos primeros torneos, y qué torneos, que servirán para retomar la actividad tras casi medio año de parón.
Uno de los que ha sabido aprovechar mejor este período sin torneos oficiales ha sido Dominic Thiem. El austríaco, actual número tres del mundo, no ha parado de jugar eventos de exhibición para mantener la extraordinaria forma que alcanzó justo antes del parón. Su entrenador, el chileno Nicolás Massú, habló para la web oficial de la ATP acerca de cómo ve a su pupilo justo a una semana de volver a las pistas.
Contacto estrecho con Thiem durante y después del confinamiento
“Siempre estuve a disposición de Dominic cuando lo necesitábamos. Su padre, Wolfgang, siempre me puso al día de lo que estaban trabajando. Dominic se quedó entrenando con su padre y con uno de sus preparadores físicos en Austria. Estoy muy contento de que haya podido mantener el ritmo durante ese tiempo”.
“Tras cuatro meses sin vernos, comenzamos nuevamente a trabajar juntos durante dos semanas antes de las exhibiciones que disputó en julio. Tras ello, estuvimos un par de semanas de vacaciones en Grecia y ahora nos hemos puesto a trabajar de nuevo. Incluso cuando estaba en cuarentena obligatoria en Chile, pude ver todos sus partidos de exhibición. Es genial que la tecnología te permita hacer esto, fue muy útil hablar con su padre sobre aquellos partidos”.
Readaptación tras un parón más largo de lo normal
“Lo positivo es que estuvo jugando muchos partidos de exhibición, no es que haya estado seis meses sin jugar absolutamente nada. Dominic jugó 28 partidos en 45 días. Fueron exhibiciones, sí, pero de un nivel muy alto. Obviamente, no es lo mismo que los torneos ATP. En un Grand Slam o en un Masters 1000, los mejores jugadores siempre están allí. Lo que intentamos fue que jugara una serie de partidos para que no acuse demasiado la inactividad cuando vuelva la competición”.
“Fue algo bueno para él porque quería jugar partidos y ama la competición. Creo que eso le ayudará en Nueva York. Está jugando bien, se ve fuerte y está realmente concentrado. Creo que ahora tiene aún más motivación ya que está acostumbrado a un calendario muy cargado”.
Volver en el momento óptimo de forma
“Hablamos mucho de eso con todo el equipo. Tras las vacaciones hemos vuelto a trabajar. Necesitamos una buena comunicación entre todo el equipo para asegurarnos de que Dominic esté lo suficientemente motivado a la hora de entrenar”.
“Hemos trabajado mucho el aspecto físico ya que hemos tenido más tiempo de lo normal, seis meses frente a las tres o cuatro semanas que normalmente tienes, para centrarnos en esto. Será interesante comprobar cómo el resto de jugadores manejan esta situación. Dominic tendrá que jugar un torneo sin aficionados, tras seis meses de parón, permanecer uno entero dentro de un hotel, pero será lo mismo para todos”.
A desquitarse en Nueva York
“En los últimos tiempos ha logrado romper varias barreras. Nunca había pasado de cuarta ronda en Australia y este año llegó a la final. Tampoco había pasado de la fase de grupos en el Masters y el año pasado terminó a sólo un par de puntos de ganar el torneo. Y en la gira asiática igual, nunca hizo grandes resultados y en 2019 ganó en Pekín”.
“Siempre que juega un torneo, Dominic tiene opciones de ganarlo. Es el tercer mejor jugador del mundo y lleva cuatro años entre los diez mejores, sus resultados han sido muy consistentes”.
Paso del cemento a la tierra
“Esto es algo nuevo, no tenemos tiempo de pensar ahora de cómo será. Lo más importante es pensar en lo inmediato, Cincinnati y US Open. Después de eso, tendremos que ver cómo se siente físicamente y cuáles han sido sus resultados. Está apuntado en Kitzbühel, pero si llegase a los cuartos de final en Nueva York no podría jugar. Es muy difícil planificar el calendario en esta situación, no hay semanas libres. Una vez que finalice en US Open, nos sentaremos y decidiremos qué es lo mejor”.
Cambios en el juego de Thiem de cara a Nueva York
“Intentamos mejorar todos los días. No es un chaval joven, pero con 26 años todavía existen algunas cosas que se pueden mejorar. Ahora ya es un jugador completo, capaz de jugar muy bien en pista dura. Esperemos que pueda lograr los mismos resultados que el año pasado”.
“Al final, la edad no importa. Como deportista, cada vez que sales a entrenar tienes que encontrar algo en lo que mejorar. Lo mismo se aplica al entrenador, por eso este deporte te da la vida. Por esa razón seguí viajando tras retirarme como jugador. Trabajar con Dominic es una gran motivación porque es un gran jugador y mejor persona. Te escucha y siempre da el 100%. Sólo necesitas decirle lo que ves en la pista”.