A los 28 años de edad, viniendo desde la clasificación el santiagueño Marco Trungelliti obtuvo de forma inesperada su primer torneo Challenger. Sucedió en Barletta, tras superar a ocho rivales alcanzó el tan ansiado título al vencer a Simone Bolelli por (2-6, 7-6 (4), 6-4).
Sin dudas será una semana inolvidable para Trunge. Llegó a Barletta con una campaña bastante irregular. Su temporada comenzó muy floja, muy por debajo de su nivel en su gira sobre cemento por Oceanía. Con su regreso a los torneos sobre polvo de ladrillo llegaron mejores resultados. Hace un mes había alcanzado la final en un torneo Future y dos semanas atrás los cuartos de final en el Challenger de Marbella.
Así llegó al sur de Italia dispuesto a jugar la clasificación, su bajo ranking no le daba otras alternativas. A pelear la entrada al cuadro principal desde el último escalón. Un camino largo y muy duro que fue sorteando con muy buenos triunfos. Superando a los favoritos del torneo como Stéfano Travaglia, Alessandro Giannessi o Jaume Munar llegó a la final. No llegaba a la pelea del título de un Challenger desde finales de 2016. En las cuatro finales anteriores vio levantar el trofeo a sus rivales.
Trunge, sus comienzos, sus logros y sus costumbres
Marco comenzó a jugar tenis en su Santiago de Estero natal. Sus padres lo practicaban en el Santiago Lawn Tennis Club, desde muy pequeño Marco los acompañó al club y le fue tomando el gusto. A los catorce años se decidió a dedicarse de lleno al tenis, primero se trasladó a Chaco y luego a Buenos Aires para seguir su carrera. En el 2006 representó a la Argentina en las finales de la Copa Davis Junior jugados en España. Ese año, con 16 años debutó en los torneos Future. Su primer punto lo logró en 2008, año en que conquistó el primero de sus siete Future.
Hasta ahora, su mejor temporada fue el 2016, ese año alcanzó su mejor ranking, el puesto 126, le ganó a un top-10, Marin Cilic en Roland Garros en cuatro sets y fue sparring del equipo de la Copa Davis que se consagró Campeón de Mundo.
Tiene fama de ser solitario, elige jugar torneos donde no van otros argentinos, jugó Challenger en China, Shanghai, Taipei, Tailandia, Kazajistán, Guadalupe, solo por citar algunos sus destinos.
Otro detalle que lo hace único es que casi siempre tiene en su equipaje una cafetera eléctrica. Le gusta prepararse el café a su modo, que en muchos destinos no lo consiguió, por ese motivo junto a las raquetas viaja la cafetera eléctrica. Ya tuvo más de un inconveniente en las Aduanas, pero Trunge no abandona esta costumbre.
Por fin llegó el primer título Challenger
Este domingo Trunge jugó su quinta final. Del otro lado de la red estaba el experimentado Simone Bolelli, quien busca recuperar el tiempo perdido con las lesiones en su rodilla izquierda. Con todo el público a su favor, el italiano buscaba un título que le es esquivo desde el 2014
El partido comenzó muy favorable para el tenista local. Ganó con mucha comodidad la primera manga. El sueño del título se alejó aún más cuando el santiagueño perdió su servicio al comienzo de la segunda manga. Con más garra que tenis, Trunge comenzó a revertir el juego, emparejó el juego al ganar la segunda manga en muerte súbita. En la manga definitiva, salvó su servicio en dos ocasiones, no dejó pasar su oportunidad, logró el ansiado quiebre y lo cerró con gran categoría.
Así por fin llega a su primer título Challenger, tantas veces esquivo, Regresa nuevamente al top-200 y se asegura un lugar en la clasificación de Roland Garros y de Wimbledon. Espero le de una buena continuidad a su carrera y que muy pronto lo tengamos peleando el Top-100 y por qué no una final ATP.