La checa sumó su quinta victoria por la vía rápida en París, derrotando por un doble 6-3 a la alemana Laura Siegemund para acceder a las semifinales de Roland Garros por segunda vez en su carrera. Su rival, una estadounidense, Danielle Collins o Sofía Kenin.
Las condiciones más pesadas y húmedas de este Roland Garros otoñal siguen viniendo de maravilla al juego de Petra Kvitova. La tenista checa, séptima favorita del cuadro, logró su acceso a las semifinales del torneo femenino individual tras otra demostración de pegada. En el primer turno de la Philippe Chatrier, Kvitova venció por un doble 6-3 a la alemana Laura Siegemund, número 66 del mundo y debutante en estas lides, en otro encuentro que dominó con claridad y en el que siempre estuvo al frente.
La pegada de Kvitova frente al contraataque de Siegemund. Así se presentaba el tercer cuarto de final del cuadro femenino de Roland Garros 2020. La checa estaba a una victoria de igualar su mejor resultado en París, las semifinales del año 2012. Sus cuatro encuentros anteriores (Dodin, Paolini, Fernández y Zhang) los despachó sin ceder una sola manga, aunque hay que decir que la undécima mejor tenista del mundo llegaba a esta ronda sin haberse medido a ninguna cabeza de serie.
Siegemund tampoco lo era, aunque sí que se la puede catalogar como especialista en tierra batida. Sus únicos dos títulos WTA (Bastad y Stuttgart) así lo avalan. La alemana alcanzó su mejor resultado en un Grand Slam tras dejar en el camino a Mladenovic (este partido con mucha polémica), Goerges, Martic y a nuestra Paula Badosa en octavos. Sólo existía un precedente entre ambas en el circuito, la primera ronda del US Open 2015, donde Kvitova arrolló a la teutona por un doble 6-1, un resultado que difícilmente se produciría hoy.
Otro encuentro plácido para Kvitova
Lo comentábamos el otro día ante Zhang. Cuanto más rápido vaya el partido y si este comienza bien para ella, mucho mejor para Kvitova. La checa salió nuevamente con la puntería muy afinada, sobre todo con un primer servicio letal en el primer set (14 de 15 en puntos ganados, un 93%). Con el servicio firmaría seis puntos directos en esta manga, donde capitalizó un total de 14 golpes ganadores.
Ante una Kvitova así de inspirada, poco se puede hacer. Siegemund trató de romper el ritmo con alguna dejada, pero eran pocas las opciones que tenía para ello, puesto que en la mayoría de los puntos era su rival la que mandaba. En poco más de media hora, la checa lograba el primer set por 6-3 aprovechando la única opción que tuvo al resto en el cuarto juego.
El segundo set fue algo más parejo pero por el pronunciado bajón de ambas al servicio. Dentro de esa irregularidad, Kvitova siempre fue por delante, adelantándose por 2-0 en el inicio. Una ventaja que perdería en un disputado cuarto juego donde Siegemund quebró por vez primera su servicio. Esto daría inicio a una concatenación de breaks que terminaría en el séptimo juego, volviendo Kvitova a romper y ponerse por delante por 4-3.
A partir de ahí, la checa puso de nuevo el piloto automático, anotándose los dos siguientes juegos con facilidad para repetir el 6-3 de la primera manga con el que cerró el choque tras 80 minutos de juego. Segunda semifinal de Roland Garros para la tenista de Bilovec, ocho años después de la primera, donde se medirá a la ganadora del duelo estadounidense entre Danielle Collins y Sofía Kenin, cuarta cabeza de serie, en busca de su primera final en el Grand Slam parisino.