El español se despide de otro torneo a las primeras de cambio. Alejandro no pudo ante un gran rival y es que Hurkacz se mostró muy superior en todo momento para llevarse la victoria por la vía rápida (6-1, 6-7(3), 6-1). En la siguiente ronda el polaco se medirá ante el británico Murray.
El debut de Alejandro Davidovich en el Masters 1000 de Cincinnati le iba a enfrentar ante un rival complicado, el polaco Hurkacz. El malagueño venía de caer a las primeras de cambio en Toronto ante Isner. Por su parte Hubert había ganado dos partidos y cedido ante el vigente campeón Daniil Medvedev. En el cara a cara había dos enfrentamientos y ambos con victoria para el español, aunque esta vez por sensaciones parecía ser favorito el polaco.
Hurkacz se acaba imponiendo
La primera manga no tuvo casi oposición y es que en los primeros minutos Hurkacz ya se marchó hasta el 5-0. Gracias a un doble break demostraba su superioridad en la pista y además estaba muy sólido con el servicio. Davidovich pudo ganar un juego, maquillar el resultado y evitar el rosco, algo importante a nivel mental. Al final le costó al polaco cerrar en el séptimo juego el primer set, pero a la quinta opción puso el 6-1 en el marcador.
Continuada con la misma dinámica el duelo y es que Davidovich sufría con su servicio una y otra vez. Poco tardó nuevamente en perder su saque y Hurkacz habría distancia en el marcador con el 3-1. Tras salvar dos bolas de break podía poner el 3-2 y animarse en busco de sacar una mejor versión a la que estaba dando. Tuvo una opción de break en el octavo juego y la aprovechó para poner las tablas justo antes de la llegada de la lluvia y la suspensión del partido. Tras la vuelta se fueron al tie break y empezó mejor el español que con un tenis agresivo cerraba el puño y se llevaba la segunda manga.
El inicio en el tercer parcial fue el mejor para el polaco que tras un break se ponía 3-0 arriba dejando encarrilado el duelo. Siguió peleando e intentando recortar distancias en el marcador, pero Davidovich no lo conseguía. Hurkacz con el marcador a favor estaba más relajado y poder jugar con más riesgos. Llegó el break definitivo en el sexto juego que le ponía con el 5-1 en el marcador. Después de salvar dos bolas de rotura que hubieran dado alguna esperanza a su rival llegó la primera bola de partido para Hubert que certificaba el triunfo.