El que fuera campeón del US Open y finalista de Wimbledon y el Open de Australia, declaró en la rueda de prensa tras su triunfo ante Auger-Aliassime que aún no ha llegado a su techo.
A sus 32 años, Marin Cilic continúa muy motivado de cara a las próximas temporadas después de un año complicado en el que no ha cuajado resultados de años anteriores. En estos instantes, fuera del Top-40, comenzó bien el Masters 1000 de París al derrotar al canadiense Felix-Auger Aliassime. «No he encontrado mi mejor forma durante esta temporada comparando con años anteriores«, explicó el croata. «El mantener el ránking por la situación vivida ha sido bueno para mí ya que no he descendido mucho y he podido jugar los torneos importantes«.
Sin embargo, por otros términos el 2020 ha sido bonito para el tenista croata ya que fue padre y pudo vivir los primeros meses de su hijo junto a su familia sin el desenfreno que depara el circuito profesional. «He podido pasar mucho tiempo con ellos por el parón y ha sido muy gratificante para mí».
De cara a visos de futuro, Cilic se encuentra con ganas de seguir en primera línea de competición. «Siento que todavía no he llegado a mi techo en el tenis profesional. Es por lo que trabajo cada día y cuando de verdad lo sienta, será un buen momento para retirarme tranquilo conmigo mismo. Me siento muy bien en la cancha tanto físicamente como mentalmente y la veteranía también me ayuda en afrontar momentos«, explicó el campeón de Grand Slam.
Por el momento, de cara a ese objetivo que tiene en mente, deberá de enfrentarse al joven francés invitado por la organización, Corentin Moutet. Será la segunda vez que se vean las caras, ya que el 21 de enero de este mismo año en el Open de Australia, Cilic pudo con el francés en segunda ronda en sets corridos.