Pablo Carreño arrancó su andadura por el Rolex París Masters con victoria ante el tenista que dejó encandilado a muchísimas personas en Roland Garros. Nada menos que Hugo Gastón.
El español tiene mínimas opciones de poder clasificarse matemáticamente a Londres y se trata de ganar el Masters 1000 de París y que Schwartzman y Berrettini sucumban en su primer partido. Es sumamente complicado, pero el tenis ya ha demostrado que no existe la palabra imposible. Sin embargo, Carreño llegó a París con otros objetivos en mente. «Vengo de semanas irregulares y mi objetivo es terminar el año como se merece«, explicó el español en unas declaraciones que recoge la página oficial de la ATP. «Ha sido una temporada muy buena, con grandes resultados, muy distinta por todo lo que ha ocurrido y se merece terminarla bien.
Vio en primera persona la calidad que proyecta el jugador francés. «Me sorprendió un poco al principio ya que entró muy agresivo, pero fui entrando en ritmo y conseguí imponer mi estilo de juego. Realicé un encuentro muy regular en todo instante«, añadió. «He llevado la iniciativa de los puntos, y logré finalizar con muy buenas sensaciones«, dijo Pablo Carreño encontrándose muy bien en París para tener que enfrentarse en segunda ronda ante un duro oponente, y más en este tipo de superficie como Jan-Lennard Struff.
«Si logro obtener mi juego, me encuentro regular y agresivo, no me veo inferior a nadie«. Sin apenas descanso deberá afrontar su próximo compromiso aunque en esta ocasión será en la pista 1 en el último turno. Por tanto, podría llegar a jugarse el envite alrededor de las 21:00 hora local. Será la sexta vez que se vean las caras y es Pablo Carreño quién domina el balance mediante un 3-2. La última vez que se enfrentaron fue en 2019 dentro de los octavos de final del ATP 500 de Hamburgo. En pista dura, sin embargo, se han enfrentado dos veces y están empatados, aunque nunca han jugado bajo techo.
