Nicolai Budkov Kjaer se lleva una enorme final masculina ante el neerlandés Mees Rottgering (6-3, 6-3) para consagrarse campeón Junior de Wimbledon. El noruego consigue así su primer título de Grand Slam.
Budkov Kjaer gana el título en el All England
Momento de la final masculina de Juniors, abriendo la jornada en el Court 1 de Wimbledon en el último día de competencia. Una definición algo desnivelada en cuanto a nombres, aunque con la garantía de que cualquiera de los dos podía quedarse con el título, buscando sumarse al grupo compuesto por nombres como Federer, Dimitrov, Monfils o Shapovalov, ganadores en esta categoría en el All England.
Nicolai Budkov Kjaer llegaba como favorito, siendo el segundo preclasificado del cuadro, quien se mantuvo sin ceder un set a lo largo de todo el torneo. El noruego fue contundente ante el japonés Naoya Honda para ser el primer jugador de su país en alcanzar una final de Grand Slam en Juniors. Por su parte, Mees Rottgering fue la gran revelación, con un camino espectacular, venciendo a los preclasificados Hayden Jones, Kaylan Bigun (máximo favorito) y Theo Papalamis en su recorrido hasta este domingo definitorio.
Victoria en sets corridos para el noruego
Una rápida ventaja en el comienzo a favor del tenista escandinavo, con un quiebre en el segundo juego para tomar las riendas del marcador lo antes posible. Juego muy importante el tercero, donde Rottgering iba a tener hasta tres oportunidades de recuperarse, pero Budkov Kjaer lo evitaba para irse arriba en cero al primer descanso. Llevando adelante esa diferencia en el score con muchísima contundencia desde el servicio, el segundo preclasificado pegaba primero quedándose con el primer set por 6-3.
La historia parecía tener un giro drástico en el inicio del segundo parcial, con una rotura en cero a favor de Rottgering, para ponerse 2-0 e ilusionarse con llevar las cosas al tercero. Dos breaks seguidos mantenían esa tendencia favorable al neerlandés, hasta que el noruego se despertó definitivamente, volviendo a ganar games cómodos al saque y firmando quiebres consecutivos para encaminar el final del partido. Con un nuevo quiebre en cero, Budkov Kjaer se aseguró la victoria con otro 6-3 y así se consagró como campeón de Wimbledon.