Gijs Brouwer demuestra que le sienta muy bien jugar en casa firmando la victoria más importante de su carrera ante el danés Holger Rune (6-4, 4-0, ret.) en su duelo por la segunda ronda del ATP 500 de Rotterdam. El neerlandés enfrentará a su compatriota Tallon Griekspoor.
Holger Rune saltaba nuevamente a la pista en Rotterdam, luego de un sólido debut ante el francés Constant Lestienne en la primera ronda. Su rival era el Wild Card local Gijs Brouwer, que venía de superar al suizo Marc-Andrea Huesler, bajo el apoyo total del público neerlandés.
Brouwer, el sorprendente cuartofinalista
Un comienzo con buena intensidad para el partido, y Rune lograba el primer quiebre ya en el quinto juego, para poder ponerse a la delantera del marcador desde temprano. A pesar de ser menos en edad, el danés tiene mucha más experiencia en estos eventos, y por eso parecía que esa diferencia inicial sería importante para tener el claro dominio. Sin embargo, el nivel de Brouwer se encargó de erradicar por completo esa idea. Mejores sensaciones al servicio y más ánimo en la devolución, le permitirían concretar dos quiebres de forma consecutiva para llevarse el set. El neerlandés ganó ese primer set por 6-4.
Si el primer parcial había sido bueno, el segundo comenzaba mejor, o al menos con más emociones en poco tiempo. El local tomaba una nueva chance de quebrar para adelantarse rápidamente por 2-0, haciendo explotar al Rotterdam Ahoy. Rune generaría una oportunidad de recuperar el break, pero el bueno de Gijs logró evitarlo, para seguir ampliando su ventaja. Más aún cuando luego de una segunda rotura, pasó a ganar por 4-0. El danés se veía abatido mentalmente, sufriendo el hecho de ser tan visitante. Antes de salir al juego siguiente, Rune decidió retirarse por una causa no detectable, sellando el pase de Brouwer a los cuartos de final.