El griego cuajó un gran partido y puso el final a la racha de victorias del jugador noruego que llegaba tras tres títulos seguidos. Tsitsipas se mostró superior y por la vía rápida clasificó a semifinales (6-1, 6-4). En la penúltima ronda del torneo le espera Opelka o Bautista.
Casper Ruud llevaba una racha inmaculada después de entrar a la historia por ganar tres títulos consecutivos. El noruego había superado en sus dos primeros encuentros de Toronto a Cilic y Lajovic, dejando buenas sensaciones. Esta vez esperaba uno de los favoritos al título, el griego Tsitsipas. El heleno había dejado mal sabor de boca en los Juegos Olímpicos y quería sumar otro título de Masters 1000 esta temporada. Stefanos había ganado a Humbert (contra el que perdió en Tokio) y Khachanov. En el cara a cara había una victoria para cada uno.
Tsitsipas modo `on fire´
La primera manga apenas tuvo batalla. Tsitsipas comenzó con una marcha más. Ganaba sus servicios con facilidad y además al resto tuvo oportunidades de break. Con una buena efectividad (1/3) sumó un doble break para ponerse 5-0 en el marcador. Ruud pudo maquillar el casillero y evitar el rosco, ganando el primer juego y llevándose los aplausos del público. Finalmente por la vía rápida el griego se llevaba el primer parcial por 6-1 ganando cómodamente a uno de los rivales que más confianza tenían en estos momentos.
Ruud mejoró sensaciones y sobre todo se volvió más agresivo con su derecha en el segundo parcial. Llegó a tener bola de break en el primer turno al resto, pero no lo consiguió. Luego tuvo que salvar dos y cada vez se le veía más sólido,, mientras el público le animaba y Ruud se lo empezaba a creer. Así llegaron hasta los juegos decisivos. Con el 4-4 de repente Tsitsipas notó que su rival estaba presionado y llegaron dos opciones de break. Tras un gran punto el griego cerraba el puño y con su servicio estaba un juego de llegar a semifinales.