El tenista canadiense mostró un nivel muy alto para eliminar al español Roberto Carballés por la vía rápida (7-6(7), 6-3, 6-0) en su cruce por la segunda ronda del US Open. Shapovalov avanza en el certamen y ahora enfrentará al sudafricano Lloyd Harris.
Denis Shapovalov partía como claro favorito en este duelo que cerraba la jornada de jueves en el Louis Armstrong Stadium. El canadiense venía de una brillante performance en su debut, sin dejar posibilidades al argentino Federico Delbonis y dejando atrás algunos golpes en los torneos previos a este US Open. Luego de las semifinales alcanzadas en Wimbledon, Denis no pudo sostener constante ese rendimiento.
Por su parte, Roberto Carballés llegaba de vencer a un complicado rival, sobre todo teniendo en cuenta la superficie, como el local Tommy Paul. Este duelo era una reedición del que disputaron ambos en Roland Garros 2020, cuando finalmente el de Tenerife acabó ganando 8-6 en el quinto, en esta misma instancia.
Shapovalov va de menor a mayor
El partido comenzó con un rápido intercambio de quiebres en los primeros dos juegos, una tendencia irregular que por suerte no duraría mucho. La igualdad tomaría lugar en el duelo, con los dos tenistas sintiéndose muy cómodos al saque, pero con un Shapovalov que se veía más dispuesto a arriesgar con tiros esquinados. Sin poder desbalancear la historia en ningún momento, todo se iría al tiebreak. En ese desempate, Carballés tomó una leve ventaja, para ponerse 6-4 y tener dos set points. Pero Shapo dio batalla, salvó esas chances y acabó ganando por 9-7.
Esa definición del primer set marcarían una notable inyección de confianza para el canadiense, que otra vez, primero salvó bola de quiebre y luego concretó su break a favor para empezar a distanciarse cada vez en el marcador. Shapovalov no volvió a bajar la intensidad, dejando sin chances a Roberto. Así fue que esa manga se definió por 6-3.
El tercer parcial sería casi un trámite para un Denis envalentonado y un Carballés abatido mentalmente, con poco resto para intentar una remontada épica como en París. En este caso, Shapovalov encarriló quiebres consecutivos para culminar la faena con un arrasador 6-0 final.