El tenista canadiense tomó la decisión de bajarse del segundo Grand Slam de la temporada, el día posterior a caer en la final del ATP de Ginebra ante Casper Ruud. Shapovalov no competirá entonces en París, y buscará prepararse de lleno para la gira de hierba.
Más allá de algunas dudas en su rendimiento al comienzo de esta temporada, Denis aparecía como uno de los grandes candidatos a golpear en Roland Garros, sobre todo por una muy buena parte final de la gira de tierra batida. De hecho, iba a ser el cabeza de serie No.14 en la cita parisina, donde buscaría dejar atrás su mala performance del 2020. Allí, cayó en segunda ronda a manos del español Roberto Carballés Baena.
Un final de gira que generaba ilusión
El inicio en tierra batida no fue fácil para Denis Shapovalov, que tuvo varias actuaciones que hacían dudar de su confianza en esta parte de la temporada. Una caída en tercera ronda de Barcelona, y principalmente una dolorosa derrota en el debut en Estoril, profundizaban esa crisis en su tenis. Pero en Roma comenzaría a resurgir, y hasta a pasar a ser considerado un duro rival de cara a Roland Garros.
En el Foro Italico, ganó dos partidos ante Majchrzak y Travaglia, pero lo más recordado es su partido de tercera ronda ante Rafael Nadal, donde llegó a tener puntos de partido, realmente dando complicaciones al mallorquín. Su buen momento continuó hasta esta última semana en Ginebra. En tierras suizas, Shapovalov consiguió notables triunfos ante especialistas en la superficie como Cecchinato, Djere y Cuevas, antes de perder la final frente a Casper Ruud.
Aún restarán conocerse los motivos de su baja para competir en París. Podrían tener que ver con un problema físico específico posterior a su gran semana en Suiza, o simplemente una diferente planificación para llegar de la mejor manera posible a jugar en césped.