Christian Garín ganó su cuarta semifinal en cuatro jugadas y peleará mañana por el título ante Diego Schwartzman que sacó adelante un durísimo partido ante Laslo Djere.
Tenemos final de dobles
Marcelo Demoliner y Matwé Middelkoop, terceros favoritos, se clasificaron a la final tras superar 6-4, 6-3 a Ariel Behar y Gonzalo Escobar. Mañana domingo enfrentarán a la pareja argentina de Leonardo Mayer y Andrés Molteni (Molteni defiende el título ganado en 2019).
Brasilero y holandés intentarán conquistar su segundo título juntos tras el obtenido en Moscú 2019, precisamente ante Molteni aunque en aquella ocasión en pareja con Simone Bolelli.
Garín, invencible en semifinales ATP
El «Tanque» añadió una nueva víctima a este récord. Fueron Ruud en San Pablo, Querrey en Houston, Cecchinato en Munich y ahora Martin en Córdoba 2020. Es el único tenista en activo con 100% de victorias en esta instancia.
Parecía que Andrej Martin iba a patear esa estadística al diablo cuando se llevó el primer set ante un Garín irreconocible totalmente. El eslovaco intentaba jugar al tenis pero la pelota no volvía y en media hora de juego daba la gran sorpresa ganando 6-2 el primer parcial.
El Tanque apareció y, apoyado por un grupo de chilenos que estaban de despedida de soltero de un amigo, comenzó a sentirse mejor, golpeando mejor la bola y con juego empezó a someter a su rival.
En 43 minutos el chileno igualó el encuentro para mandarlo al tercer set. El mejor tenis se vio en esta manga.
Andrej Martin comenzó a sentir el cansancio físico (jugó semifinales en Punta del Este la semana anterior) por lo que desarrolló un juego más agresivo que Garín supo desenrollar a la perfección quebrando en el primer y quinto juego del tercer set.
Finalmente Garín pudo cerrar el partido en dos horas de juego (2-6, 6-2, 6-2) para clasificar a su cuarta final de ATP, ganó dos de las tres anteriores que jugó (curiosamente la única perdida fue ante un argentino, Pella).
Schwartzman pudo con la solidez de Djere
Podrá no tener ningún punto sobresaliente pero Laslo Djere no tiene ninguna carencia técnica y en esta superficie se vuelve un jugador sumamente peligroso y como no transmite ninguna sensación puede llegar a sacar de quicio a sus rivales.
Ayer Diego Schwartzman jugó su peor partido en el torneo pero sacó ese extra que demuestra porqué hace tanto tiempo es jugador top20. El partido arrancó con un quiebre abajo pero luego hilvanó seis juegos seguidos para llevarse en tan solo 28 minutos el primer set.
El partido se puede definir como muy cambiante y no sería una mala definición. Los roles se invirtieron y Djere comenzó a hacer todo bien, llegando incluso a tener pelota para set en el sexto juego que Diego pudo salvar para evitar el rosco aunque en el séptimo juego el serbio cerró el segundo.
El tercero fue el más dramático, en el primer juego el argentino levantó dos pelotas de quiebre que levantaron a la gente. En el juego siguiente Djere sacaba 40-0 pero cometió algunos errores, sumado a una genialidad de Schwartzman combinando su gran agilidad de piernas y talento, y Diego ganó cinco puntos seguidos para llevarse un quiebre inesperado.
En el siguiente game nuevamente Djere tuvo dos pelotas de quiebre para reengancharse al encuentro y el argentino, alentado por la gente, las salvó nuevamente para colocarse 3-0 pero sabiendo que podría estar 0-3.
Diego volvió a tener volvió a tener punto de quiebre con el set 4-1 que no pudo aprovechar, aunque sí pudo aprovecharla cuando estas significan puntos de partido en el octavo game para llevarse una tremenda victoria (6-1, 1-6, 6-2) ante un rival mucho más duro de lo que parecía en la previa.
Último día
Desde las 17 hora local los argentinos Leonardo Mayer y Andrés Molteni buscarán dar la primera alegría del día ante el brasilero Marcelo Demoliner y el holandés Matwé Middelkoop.
Luego de la final de dobles Diego Schwartzman buscará ganar su primer título en Argentina pero tendrá un duro rival como Christian Garín, el historial favorece a Diego 2-1.
El torneo presentará una de las mejores finales posibles y el estadio lucirá lleno totalmente para alentar al Peque Schwartzman.
