Argentina no tendrá representante en la final de Budapest. Podoroska luchó pero perdió en tres mangas ante la rusa Timofeeva (6-7(6), 6-3, 3-6) y dice adiós al título en la capital húngara.
Nadia Podoroska afrontaba el cuarto de los encuentros correspondientes a una nueva edición de un torneo WTA en la ciudad de Budapest en este mes de julio de 2023. Lo hacía tras seguir adelante en el cuadro final femenino, donde tendría que medirse en las semifinales ante la tenista rusa Maria Timofeeva. La jugadora argentina llegaba a este enfrentamiento tras haber superado desde su debut a Storm Hunter, Anna Siskova y Elina Avanesyan. Por su parte la tenista natural de Rusia llegaba a este partido tras haber hecho lo propio anteriormente ante Daria Saville, Diana Shnaider y Kaja Juvan. Dentro del head to head no existen precedentes entre ambos tenistas, por lo que será la primera vez que se verán las caras en competición oficial.
Podoroska se queda con la miel en los labios
El partido comenzó con una rotura para cada lado. Desde ese momento ambas se mostraron seguras con el servicio. Timofeeva estaba siendo valiente y jugando de tú a tú a Podoroska. La rusa logró un break en el séptimo juego que tras confirmarlo le mandaba hasta el 5-3. Nadia sacó esa garra y esa personalidad para después de salvar bola de set en contra lograr un break en el décimo juego que ponía el 5-5. Finalmente se iban a la muerte súbita y aquí fue mejor Timofeeva que por 8-6 se llevaba la primera manga después de una hora 10 minutos.
Nadia no iba a bajar los brazos, sabiendo de la gran oportunidad que tenía de plantarse en la final en el WTA de Budapest. Comenzó el parcial igual que en la primera manga, con dos roturas, una para cada lado. Poco a poco la argentina fue imponiendo su ley, siendo sólida desde el fondo de la pista y moviendo a una rival que parecía algo cansada. La rusa perdió dos turnos de servicio y por 6-3 Podoroska acababa forzando el set definitivo.
El inicio de la tercera manga fue durísimo. Podoroska daba la sensación de estar mejor físicamente y poco a poco la balanza parecía decantarse de su lado. En cambio Timofoeeva aguantaba los envites de la argentina y a partir del 3-3 la rusa se adueñó del encuentro, Maria volvía a estar intensiva con sus golpes y se aprovechaba de algunos regalos de Podoroska, para finalmente por 6-3, a la tercera bola de partido lograr el pase a la final y dejar a Podoroska a las puertas de luchar por el título en Budapest.