La letona fue muy superior a Pliskova, una de las favoritas al trofeo (6-4, 6-2). Ostapenko jugó muy bien, variando mucho su tenis y sobre todo con pocos fallos. Jelena está decidida a intentar volver a ganar ese trofeo que consiguió en 2017 en la Philippe Chatrier.
Duelo trepidante el que esperaba para inaugurar la quinta jornada de Roland Garros en la Philippe Chatrier. Karolina Pliskova, actual número 2 del ranking femenino se iba enfrentar a Jelena Ostapenko. La letona fue la campeona ante todo pronóstico en 2017, pero desde entonces más sombras que luces. La letona no era la favorita pero tenía el juego para poder eliminar a una de las favoritas.
Las cosas empezaron mal para la checa. Pliskova ya dejó una mala imagen ante la egipcia Sherif en su debut con la que estuvo a punto de caer ante todo pronóstico. Ostapenko en cambio tuvo un debut más sencillo y llegaba con más confianza. Los nervios estaban presentes en los primeros juegos y durante los tres primeros servicios vimos tres roturas. Luefo por fin la letona ganó su saque y puso el 3-1. Pliskova empezó a pegar más fuerte y llegaron algunos errores no forzados de Ostapenko que veía como la ventaja se esfumaba y el 3-3 mandaba en el marcador.
En cambio Jelena no bajó el ritmo y siguió agresiva al resto, sobre todo al segundo servicio. Cuando Pliskova fallaba el primer saque Ostapenko entraba en pista y buscaba el tiro ganador. Así volvía a quebrar para tomar la iniciativa. Ya no hubo más alternativas y ambas mantuvieron el servicio. Por lo tanto el set cayó para la letona 6-4 dejando claro que tenía las claves para superar a Pliskova.
Ostapenko brilla en la segunda manga
Igual empezó el segundo set. Agresiva al resto, pero sabiendo cuando golpear profundo o cuando atraer a su rival con bolas cortas más cerca de la red. Primer juego y break. Tácticamente la letona estaba perfecta, variando golpes planos, con ángulos y dejadas que volvían loca a Pliskova. Karolina no encontraba la forma de hacer daño a su rival ni al saque ni al resto. El quinto juego pudo dejar el partido casi sentenciado pero levantó la checa esa bola de break que hubiera puesto el 4-1. En cambio Pliskova seguía en el partido con el 3-2.
Llegaban a la hora de partido y Ostapenko estaba a dos juegos de cerrar el duelo. El primero lo sumó al resto y se sentaba en el banquillo con 5-2 y servicio para confirmar su pase a tercera ronda. Con mucha tranquilidad llegaron los dos primeros puntos de partido tras un 40-15. Llegaron los nervios y un error no forzado más una doble falta ponían el deuce. A la tercera con una fallo de Pliskova llegó el triunfo de la letona.
