El español es el nuevo campeón del Mubadala World Tennis Championship al ganar en un partido de más de tres horas a Tsitsipas (6-7(3), 7-5, 7-6(3)) que nada tuvo que ver con una exhibición. Djokovic ganó en la final de consolación a Khachanov por la vía rápida.
Rafael Nadal y Stefanos Tsitsipas se medían por el título en el Mubadala World Tennis Championship. El español había superado de manera cómoda a Khachanov en las semifinales, mientras que el heleno remontó un set adverso a Djokovic para llegar hasta la gran cita. El partido comenzó al revés de lo esperado con un Stefanos mucho más concentrado y acertado que Nadal. El griego empezó mandando en el marcador y durante los tres primeros juegos del saque de Nadal tuvo opciones de rotura, y no una ni dos, sino hasta siete, pero en ninguna de ellas consiguió acertar. El partido estaba en la mano de Tsitsipas, jugando un tenis agresivo y dominando a Nadal, pero el marcador no demostraba esa superioridad.
El tenis es un deporte muy duro a nivel mental y cuando llegaban los juegos decisivos el español empezaba a demostrar su favoritismo. Con el 4-4 llegaron las dos primeras bolas de break para Nadal. Falló la primera, pero aprovechó la segunda y se fue al cambio de campo con el servicio para cerrar la primera manga después de todos los problemas que había tenido que superar. A los 45 minutos el marcador indicaba un 40-15 que eran dos bolas de set, pero Tsitsipas puso el deuce en el marcador para darle más emoción al juego. Con mucha personalidad el griego volvía a tener una nueva bola de rotura, la octava y esta vez sí lo consiguió.
El saque volvió a aparecer y el griego en blanco ganaba el juego para ponerse 6-5 y restar para intentar adjudicarse este primer set tan igualado. Finalmente aunque sufriendo la primera manga se decidió en el tie break. De repente llegaron unos errores que Rafa no había cometido en todo el partido y Tsitsipas lo aprovechó a la perfección para después de levantar dos bolas de set en contra acabar llevándose la primera manga.
En el inicio de la segunda manga Nadal comenzó más acertado y por eso se llevó los dos primeros juegos en blanco. En cambio el saque de Tsitsipas no le permitía al español poder encontrar ninguno punto débil. Con igualdad máxima los juegos iban sumando en el marcador y se acercaban los momentos decisivos que iban a marcar el devenir del encuentro. Nadal encontró los primeros problemas en el noveno juego cuando el heleno dispuso de dos bolas de break con segundo saque pero al final el número uno salvó la situación. La presión pasaba para el otro lado y Nadal restaba para llevar el partido al tercer set. Sin problemas para Stefanos con otro juego en blanco que parecía no sentir la presión. En cambio luego en el duodécimo juego llegó una oportunidad de rotura. Esto significó la bola de set y Nadal acertó para llevar el desenlace del encuentro al parcial definitivo.
Nadal culminó la remontada
Las sensaciones eran totalmente opuestas según pasaban los juegos del tercer set. Todo quedó más claro cuando el heleno se enfadó y golpeó su raqueta con rabia después de haber tenido el partido en su mano. Tras un juego lleno de errores de Tsitsipas llegaba la rotura de Nadal que le ponía 4-2 arriba y servicio para quedarse a solo un juego del triunfo. El heleno resistió y gracias a su calidad pudo devolver la rotura al español. Nadal se marchó cabreado al banquillo sabedor de lo importante que era ese juego. Con el 4-4 ambos sabían que el partido se iba a decidir por pequeños detalles. Ninguno falló en los dos siguientes juegos y cada vez el título estaba más cerca de decirse en otro tie break. Rafa hizo los deberes sumo el servicio y como mínimo se aseguraba la muerte súbita.
Sufriendo pero al final se llegó al desempate y el ganador en 2019 se iba a decidir en el tie break. El primer mini break fue para Nadal después de fallar una derecha invertida el heleno. En los dos siguientes juegos apareció el saque de Rafa y en un momento tenía el 4-1 en el marcador. No falló el heleno que se quedaba cerca del objetivo tras ganar sus dos puntos al servicio 4-3. El español siguió haciendo los deberes y el marcador registraba un 6-3 que ponían tres bolas de campeonato para Nadal. A la primera lo logró y culminó la remontada después de estar contra las cuerdas en la segunda manga.
