El serbio superó en dos mangas a Alejandro Davidovich (6-4, 6-4). Lajovic demostró el gran jugador que es en esta superficie. El español sigue en progresión y ha vuelto a sacar sensaciones positivas tras pasar la fase previa en un gran torneo. Dusan espera a Raonic o Mannarino.
Alejandro Davidovich llegaba con mucha confianza a Roma tras ser una de las revelaciones del US Open. El español además pasó la fase previa del torneo romano con muy buenas sensaciones tras vencer a Londero, Sugita y Moutet. En su primera ronda del cuadro final llegaba un jugador que no traía mucha confianza en su tenis pero que cuenta con mucha experiencia en el circuito y es un gran tenista sobre arcilla. Lajovic fue la gran sorpresa de Montecarlo 2019 cuando llegó a la final en la que se enfrentó contra Fognini.
El serbio comenzó mejor sobre todo al resto y es que en el tercer juego ya sumó un break muy importante que le daba ventaja. Según pasaban los juegos Dusan estaba más cómodo en la pista. El español no se encontraba cómodo al servicio y es que Lajovic dominaba la mayoría de intercambios desde el fondo de la pista. Hasta cinco bolas de break llegó a tener en la primera manga que le valieron para llevarse el primer parcial dejando muestras de lo bien que es capaz de jugar en esta superficie.
Lajovic sentencia el partido
Davidovich necesitaba cambiar la dinámica del partido. El malagueño seguía sufriendo al servicio. Lajovic estaba inspirado y frenar a este jugador a gran nivel es complicado. Desde el inicio el serbio tomó las riendas con una rotura que confirmó con su servicio y ponía el 2-0 a su favor. Davidovich no se rindió y siguió buscando ese break que le devolviera la esperanza. Al final en el sexto juego puso el 3-3 y el partido estaba en tablas en este segundo parcial. Poco le duró la alegría al español ya que justo en el siguiente juego llegó otra nueva rotura que dejaban a Lajovic con 4-3 a dos juegos del triunfo. Tirando de experiencia sacó los dos siguientes games al servicio para conseguir un triunfo ante un jugador que llegaba con mucha moral.