El catalán David Jordà Sanchís ha sido una de las grandes revelaciones del Challenger Les Franqueses.
A sus 28 años era un habitual del circuito ITF con una dilatada experiencia ya que desde el año 2009 compite en esa categoría. Sin embargo aquí en el Club Tennis Els Gorchs, su presidente Jaume Marquès confió en él y le otorgaron una wild card para el cuadro final y David la aprovechó a la perfección. No sólo compitió por primera vez en una cita de esta entidad sino que además ganó dos partidos y terminó perdiendo en cuartos de final ante un top 100 como es el australiano Max Purcell.
Jordá a establecer en el circuito Challenger
David se esperaba que llegara este momento ya que en el último año había podido competir sin lesiones y se sentía muy cómodo y con el nivel para ganar partidos de esta entidad. Según el tarraconense hay muchas diferencias entre el circuito Challenger y el ITF pero principalmente basadas en el trato a los jugadores, el tipo de instalaciones, la comida y el tener jueces de línea y no tan solo de silla.
Jordà ha tenido muchas operaciones a lo largo de su carrera que le han impedido tener continuidad y poder progresar mucho más. Llegó un momento que empezó a dudar de si mismo pero entonces volvió a casa, se rodeó de su gente y ello le ayudó a no rendirse. Entrena habitualmente en Tarragona pero ahí le faltan jugadores para entrenar por lo que tiene que desplazarse al Real Club Tenis Barcelona para compartir pista con jugadores como Max Alcalá.
A corto plazo se marca el objetivo de establecerse como jugador del circuito Challenger y no volver hacia atrás ya que ya tiene una edad como para dar ya el salto definitivo sin olvidar que el sueño de estar alguna vez en el top 100 aún lo ve posible a largo plazo.
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