El luso es uno de los mejores jugadores de la historia del tenis portugués. Gil fue una de las grandes sensaciones del año 2010 y 2011 tras la final de Estoril y los cuartos en el Masters 1000 de Montecarlo, alcanzando el puesto 62 del ranking ATP. Ha superado a rivales de la entidad de Monfils y también se ha enfrentado a Federer, Nadal o Murray. Tras un pequeño bache está dispuesto a volver a competir en torneos ATP. Ha comenzado el año jugando un gran tenis y participando en finales tanto en singles como en dobles. En esta entrevista en exclusiva Fred nos cuenta los consejos que deben seguir los jóvenes jugadores y lo que ha significado el tenis en su vida.
Hola Fred. Tienes una larga carrera profesional, ¿qué es lo mejor que te ha sucedido desde que comenzaste?
Desde que empecé lo mejor ha sido la competición, los torneos, el viaje, el aprendizaje de la vida, del deporte. El tenis es un mundo, desde las raquetas, a la táctica, la técnica, el ambiente. Esto es un aprendizaje muy grande. Estoy muy feliz por ello y por hacer un deporte que me gusta tanto.
En el año 2006 recibiste una invitación en el ATP de Estoril en tu país natal. Llegaste hasta los cuartos de final perdiendo contra Nalbandian siendo la gran sorpresa del torneo. ¿Qué significó para ti?
En 2006 fue una sensación increíble jugar en la pista Central del Estoril Open llena. Me acuerdo que fue un viernes y estaba mi canción favorita cuando entre en pista, la «World Hold On» de Bob Sinclair y otra más. Me preguntaron cual quería y yo la pedí. Estaba muy contento pero muy nervioso porque nunca había jugado contra un jugador tan bueno. La verdad que fue de los mejores partidos y uno de los mejores jugadores contra los que jugué. Jugó muy bien, rápido, me hacía shots que no esperaba, de sitio, de velocidad, fue un ritmo completamente diferente de lo que había jugado hasta ese momento. Acabé muy contento con esa semana y me dio confianza para seguir trabajando cada vez más y mejor.

Llegar a cuartos de final en tu primer torneo ATP, ¿te aportó una confianza extra en tu juego? ¿Qué sentiste al jugar en Estoril en una pista en la que todo el público te arropaba?
Sí, me dio confianza para seguir mejorando y trabajando. Normalmente juego mejor en casa porque quiero demostrar que es posible y como tengo mucha fe en mí, pues juego mejor porque demuestro a la gente como se debe hacer y me salió bien. Estuve muy contento de jugar este torneo y tenía ganas el año siguiente de hacerlo un poco mejor.
¿Cuál ha sido tu partido más especial? Te enfrenaste a Federer, considerado el mejor tenista de todos los tiempos, ¿qué nos puedes decir? También has jugado en dos ocasiones contra Rafa Nadal, ¿Cómo fueron estos partidos? ¿Con cuál disfrutaste más de los dos?
Federer y Nadal son muy diferentes. Contra Federer fue en casa, en cuartos de final y con más experiencia, en el año 2008. Sentí que me dejó jugar mucho, 4-4 en el primer set. Pero luego también noté que puso una marcha más y se marchó 6-4, 6-1. Del 4-4 al resultado final fue muy rápido. Empezó a jugar a una velocidad más alta que la mía, yo estaba más parado, sin solución, más al límite. Federer es un jugador increíble y con mucha experiencia.
Nadal es un gladiador, un batallador, una pared. Es muy difícil de jugar en tierra contra él. Me acuerdo en Barcelona quedé 6-2, 6-2. Era imposible hacerle un winner, imposible ganarle un punto por consistencia, cometía muy pocos errores. Con un peso de bola increíble, pesada, alta. Yo no veía chances, imposible y estaba jugando mi mejor tenis. En Miami fue diferente, mismo año pero muy diferente. Me jugaba corto, me fallaba, me dejaba entrar, parecía otro en un par de meses y yo estuve bien en ese partido. Además la pista rápida me gusta más.

En 2009 superar por primera vez el top-100, y te conviertes en el segundo jugador de Portugal en hacerlo por detrás de Nuno Marques. ¿Era uno de tus objetivos?
Sí, claramente era uno de mis objetivos, entrar top-100. Más que eso era superar la barrera de Nuno Marques del 86 del ranking, porque quería llegar al top-50 y romper todas las metas que existían en Portugal. Estoy muy contento y feliz de cumplir esos objetivos. La verdad que no fue fácil, porque muchas veces la mentalidad de la gente no es la mejor. Los demás a veces parecen mejores y fue ir quebrando barreras también un poco psicológicas, mías, de mis entrenadores y de la gente que estaba a mi lado. Al final lo logré con mucha ayuda de mi familia, mis amigos, mi material, mis raquetas y mucha fe.
En 2010, te conviertes en el primer jugador en disputar una final de singles en el ATP de Estoril. ¿Qué recuerdas de aquella edición?
En la final de 2010, las sensaciones fueron muy buenas. No me esperaba llegar a la final. Fui al torneo a competir, pero con el objetivo de mejorar de forma, ya que no estaba muy bien. Me tocó un cuadro más o menos bueno, ya que se retiró Monfils y Ljubicic. La verdad que lo aproveché. Vi el cuadro y vi que podía ganar a todos hasta las semifinales. En semis lo di todo con García-López, en una batalla a tres sets.
En la final casi podría haber ganado, pero ya estaba un poco feliz con la final y cansadísimo de la semana, por la tensión, el partido con Rui Machado en cuartos, que estuve vomitando la noche anterior y estaba muy nervioso. Se juntó todo, pero feliz y contento. No era nada que supiera que no pudiera hacer. Yo quería llevarme el título y sigo queriendo. Estuve muy cerca con 3-0 en el tercero pero la verdad es que igual no estaba preparado para ganar. Empece a pensar cómo iba a festejar y ya mi cabeza se fue del partido, cuando quiso ya no podía volver. Además Montañés estaba muy sólido y con más experiencia.
En 2011, conseguiste tu mejor ranking y venciste en uno de tus mejores partidos a Monfils en el Masters 1000 de Montecarlo. ¿Qué nos cuentas de este año?
Una gran victoria ante Monfils. Pasé desde la qualy, ganando cinco partidos y en el sexto perdí con Murray. Estaba físicamente muy cansado, porque jugar a ese nivel tantos días seguidos no estaba acostumbrado. La verdad que hice un esfuerzo muy grande para lograr eso y jugué un buen tenis. Estaba bien acompañado, por un entrenador, un amigo, y estaba muy trabajador.

Después del 2011, has tenido que batallar en el circuito Challenger y Future. ¿Qué es lo que ocurrió?
Cuando dejé de jugar, fue una fase que ya estaba 300 del mundo y las cosas no me estaban yendo muy bien. Me centré mucho más en mi vida personal, porque hasta ese momento había invertido todo mi tiempo en el tenis. Como no me estaba yendo bien, me quedé un poco triste con mis resultados, mi vida, mi coach. Empecé a cambiar muchas cosas, al final perdí un poco el camino y el ritmo. Fue una desilusión un poco grande y me tomé un tiempo de parar y cuando traté de volver las cosas no estaban saliendo bien. Fue una fase media dura.
¿Hay mucha diferencia entre disputar un Grand Slam y otros torneos menores?
Bueno hay mucha diferencia. La motivación, el dinero, las bolas, los árbitros. Todo es diferente en torneos grandes y torneos pequeños. Esto también te hace jugar más o menos. En torneo grandes, con más dinero, más condiciones, es más fácil tener la motivación alta, que en estos torneos Futures y Challengers porque hay menos medios de comunicación, premios, puntos. Todo eso también pesa, el ambiente, las personas, la energía de la gente. Todo esto me afecta. Afecta a los buenos y a los malos, a toda la gente.

Sobre esta temporada. ¿Qué tienes planificado y cuáles son tus objetivos?
Mis objetivos es llegar a top-300 en singles y mantener el ranking lo mejor posible en dobles, porque en estos Futures es muy difícil subir más en dobles. Estoy 227º y tengo muchas finales y torneos ganados y ya no puede subir mucho más. Tendré que jugar torneos más grandes en dobles para subir. Pero mi objetivo está más o menos en volver a los 300 en singles, para tener acceso a torneos más grandes como Challengers y las qualys de Grand Slam.
Has comenzado bien el año con unos cuartos, dos semis y una final. ¿Cómo te has encontrado?
Este año empecé muy bien con una final en singles, y campeón en dobles. Además dos finales más en dobles, otras dos semifinales en singles. Jugando estable, jugando bien, las cosas me están volviendo a salir bien. Creo que manteniendo una buena base trabajo, de motivación y físico me vuelvo a meter arriba, por eso hay que mantenerse firme.
¿Qué esperas de la próxima gira de torneos Futures que disputarás en la zona del Algarve?
Estoy muy contento de estar en el Algarve. Espero poder jugar muy bien, como jugué en América y hacer buenos resultados. Voy a trabajar por estar bien en la gira, dando mi máximo y aprovechando con mis amigos, mi familia y con mi equipo. También tratar de jugar lo mejor posible.
En dobles has conseguido tu mejor ranking en los últimos cinco años. Consiguiendo dos finales y un título. ¿Qué tienes planificado en esta modalidad?
En dobles de momento mantenerme lo mejor posible con los Futures, pero subir el ranking de singles para subir el nivel a Challenger y poco a poco a un ATP para ganar más puntos.

Tratar también de encontrar un partner más fijo, de futuro para hacer team conmigo. No es fácil encontrar esa persona. Estoy buscando también eso, un partner más fijo, que me apoye y me ayude más, porque me gusta mucho jugar el dobles, juego bien y tendría que tener un partner más a full y que me aporte más ayudas.
¿Cuál es tu mejor y peor recuerdo?
El mejor recuerdo la final de Estoril. También cuando gané en cinco sets en Copa Davis perdiendo por dos sets a cero y ganamos a Argelia y subimos a la primera división, fue algo grande para nosotros. Los títulos y momentos buenos son recuerdos grandes.
Los peores, cuando pierdes y juegas mal. Cuando no tenía motivación de jugar, cuando paré, cuando las cosas no me estaban saliendo bien.
¿Cuál fue el rival más peculiar (bueno y malo) al que te enfrentaste?
Recientemente ahora en América fue con Javi Martí, fue una batalla medio campal, de tenis, con el coach, conmigo, osea fue así medio raro. Parecía cuando era joven hay en esos torneos nacionales que nos pegábamos hay unos con los otros. Pero bueno es tenis es normal, esto pasa a veces y también tiene que ver con las personas que estamos al frente.
¿Qué ha sido lo que más te ha aportado el tenis?
El tenis me aportó trabajo, dedicación, un amor, una disciplina, un estilo de vida, una forma de pensar diferente de muchas personas que conozco. También dinero, mucha distancia, viajes, es una vida dura. No es fácil ser un buen muy jugador, estar lejos de la familia, de la mujer, de las cosas que te gustan mucho. Luego tienes que hacer muchos sacrificios para estar en forma, tanto a nivel mental como de comidas, entrenamientos, preparación. Las exigencias son muy altas y hay que estar muy preparado para jugar bien.
Sí, yo creo que sí, volveré a jugar un ATP. Los últimos años he jugado el torneo de Estoril con wild card. Pero sí, yo creo que voy a volver a estar más arriba. Mi nivel no es de Future ni de Challenger, mi nivel es de ATP, por eso creo que en el futuro estaré ahí.

¿Cómo ves el tenis portugués en la actualidad? ¿Y en los próximos años?
El tenis portugués ha subido mucho de nivel de jugadores, de torneos, de profesionalismo. Osea tenemos más jugadores profesionales, con un equipo de la Federación más atento, dedicado. Finalmente tenemos un presidente dedicado a tiempo completo y dinero para invertir. El tenis está creciendo mucho en Portugal con muchos más torneos y eso hace que la gente juegue más, sin gastar tanto dinero. Por eso es más fácil tener buenos jugadores profesionales y en el ranking mundial. Veo que está mejorando, pero que falta mucha mentalidad de campeón para estar más arriba.
¿Qué recomiendas a los jóvenes que están empezando a disputar torneos?
Que tengan fe, que trabajen delante de un buen profesional, que hagan el máximo esfuerzo, que sean persistentes, que no desistan al primer fallo o primer derrota. El tenis es un aprendizaje y un proceso, es un camino, entonces hay que estar muy tranquilo, pero muy dedicado.