La Agencia Reuters ha recogido unas declaraciones muy polémicas de Novak Djokovic en un directo de Facebook con otros deportistas serbios. El de Belgrado se posiciona completamente anti-vacunas, y dice que le supondría un gran dilema que fuera obligatorio para los jugadores vacunarse para viajar.
Novak Djokovic ha asombrado a propios y extraños con sus últimas declaraciones. Ha dejado clara su disconformidad con la posible obligación de vacunarse para el coronavirus cuando los tenistas tengan que viajar para competir.
»Personalmente, me opongo a la vacunación, y no quisiera ser forzado por nadie a vacunarme para poder viajar», comentaba el serbio.
»Pero si se vuelve obligatorio, ¿qué pasará? Tendré que tomar una decisión. Tengo mis propios pensamientos al respecto y si cambiarán en algún momento o no, no lo sé. Hipotéticamente, si la temporada se reanudara en julio, agosto o septiembre, que es improbable, entiendo que la vacuna se volverá un requerimiento, justo después de salir de una cuarentena estricta, y todavía no hay vacuna».
En estos momentos el de Belgrado también está trabajando para lograr reunir más de 4 millones de dólares y de esta forma poder ayudar con la cantidad de 10.000$ a cada uno de los tenistas que se encuentran entre los 250 y 700 del ranking.
Una »decisión» controvertida
¿Qué significa »tomar una decisión»? ¿Podría el serbio no competir mientras fuera obligatoria una vacuna para el coronavirus? Indudablemente, estas declaraciones por parte de Djokovic darán mucho que hablar, aunque no es el primero que saca el tema vacunas. Mauresmo, ex número 1 WTA y ex entrenadora de Murray, ya comentó hace un mes escaso que sin vacunas no podría retomarse la acción tenística en 2020.
Veremos qué pasa finalmente, y qué es lo que »decide» Novak Djokovic, porque está claro, que aunque a mucha gente no se le haya pasado por la cabeza, es bastante posible que sea obligatorio vacunarse para todos los tenistas. Viajan con sus respectivos equipos, y viniendo de países del mundo diferentes, podrían arriesgarse a contagiar a otros. El campeón del último Australian Open, por lo pronto, parece dar un claro »no» a la vacuna obligatoria para el COVID-19.