Una vez finalizado elcCalendario ATP durante este 2018, es momento de sacar a relucir las cuentas de fin de temporada. Calibrar donde estaban puestas las expectativas de cada uno de los tenistas y si se han cumplido según su verdadero potencial. Vaya, lo que han sido siempre las notas de fin de curso.
En este caso, toca hablar de los alumnos con más talento de la clase. Aquellos que llevan muchos años demostrando que son capaces de cualquier cosa, incluso de volver cuando menos se les espera. El tridente formado por Roger Federer, Rafael Nadal y Novak Djokovic ha vuelto a dominar en este 2018, donde han logrado conquistar entre los tres todos los títulos de Grand Slam en juego y cinco de los nueve Masters 1000 que se disputaron. Pese a ello, existen diversos matices entre ellos.
En el caso de Federer, comenzó el año de la mejor de las maneras. Título en Australia por segundo año consecutivo y le permitió alcanzar el mágico número de 20 Grand Slam. No obstante, fue éste su punto álgido de la temporada. Su ausencia durante la gira de tierra y su débil participación en Wimbledon, la gira americana y los torneos indoor configuran una temporada demasiado irregular para un genio como él. Pese a ello, fue capaz de ganar en Basilea y quedarse a un sólo título de los 100. Pese a ello, para muchos aficionados, aunque no venciese más, es ya un regalo verle de corto en una pista de tenis.
El caso de Rafael Nadal es muy distinto. Condicionado por las lesiones durante este 2018, no pudo competir en condiciones en Australia y se ausentó en Indian Wells y Miami. No obstante, parece que la tierra batida regenera la salud física y anímica del mallorquín, que logro cuatro títulos en el polvo de ladrillo, entre los que se encuentra Roland Garros. En agosto, llegaba el cemento de Montreal y Rafa lograba un nuevo título de Masters 1000, siendo el que ha logrado más torneos de este tipo durante el año y en toda la historia. Pero la euforia del título en Canadá y la ausencia por precaución en Cincinnati no calmó sus perennes molestias físicas, y la rodilla le obligó a retirarse en plenas semifinales del US Open. Y fue esta su última participación en este 2018, hecho que deja un sabor ciertamente agridulce.
Por último, Novak Djokovic, para dar fe del refrán de que los últimos serán los primeros. El serbio comenzó dubitativo el año, con cierta impotencia de no recuperar su nivel de tenis ni su mentalidad ganadora. Pese a sufrir dolorosas derrotas en los primeros torneos del año, y llegar a pensar incluso en dejar el tenis, el serbio encauzó el rumbo y logró un rendimiento progresivo, levantando título en Wimbledon, Cincinnati, US Open y Shanghái, y alcanzando la final en Bercy y las ATP Finals. Una colección de títulos que le han llevado a recuperar el número 1 del mundo y el respeto absoluto del tenis mundial.
Sin duda, tres actuaciones muy distintas en momentos dispares, de tres genios que glorifican su trayectoria aún más. ¿Quién fue el mejor? Juzguen ustedes. Lo mejor de esto es que 2019 promete emociones aún mas fuertes.