La tenista estadounidense sigue en su buena dinámica en Miami tras vencer a Vera Zvonareva en dos mangas (6-1, 6-4).
Danielle Collins continúa con su racha de victorias. La estadounidense ya está en tercera ronda del torneo americano y lo hace dejando unas sensaciones muy positivas tanto con su servicio como al resto ante una Vera Zvonareva venida a menos y que no pudo frenar el torrente ofensivo que tenía enfrente.
La reciente finalista del Open de Australia llegaba al torneo de Miami tras superar una lesión que la impidió jugar la gira por Oriente Medio y llegaba a Miami tras retirarse en su partido de Dubái ante Marketa Vondrousova. Zvonareva por su parte, venía de superar una exigente fase previa y de vencer en primera ronda a Misaki Doi y en segunda a Tamara Zidansek hasta plantarse con una Collins que venía de vencer a Bondar en tres mangas.
Collins se impone
El partido presentaba un guión de poderío ofensivo en la pista, y es que ambas jugadoras presentan un tenis agresivo sobre todo con su golpe de revés, la mejor arma de las dos tenistas. Collins rápidamente impondría sus poderosos golpes agresivos para abrir brecha ante una Zvonareva que no encontraba respuestas al tenis directo de la americana, la cual no cedería su servicio en todo el primer set para imponerse de forma muy clara por un claro 6-1 gracias a un tenis muy efectivo tanto al saque como a la hora de restar.
La segunda manga comenzaba muy bien para una Collins que rápidamente conseguiría un nuevo break a costa de una irregular Zvonareva. La estadounidense seguía manteniendo su ventaja en los primeros juegos del set, pero poco después Zvonareva recuperaría el break perdido a costa de los errores de una Collins que no conseguía mantener el nivel tan alto del inicio del partido.
Zvonareva conseguiría salvar una situación límite en varios momentos del set, pero finalmente Collins rompería de nuevo el saque de la rusa para volver a tomar la iniciativa en el partido y finalmente cerraría con su saque el partido para sellar así el pase a los octavos de final del torneo de Miami de forma muy contundente y con una imagen muy positiva.