Karolina Pliskova comienza de manera positiva su andadura por Melbourne. Derrotó en su primer compromiso a Elisabetta Cocciaretto por 6-3, 6-2 en el Yarra Valley Classic WTA 500. Se enfrentará en tercera ronda ante la estadounidense Danielle Collins.
La italiana que no comenzó del todo bien el torneo al recibir un rosco en el primer set de primera ronda, consiguió sacar adelante su choque ante Lin Zhu. Por otra parte, se encontraba Pliskova como tercera cabeza de serie, teniendo que entrar en escena en segunda ronda. En Abu Dhabi, la checa se tuvo que despedir rápido al caer de manera sorpresiva ante Anastasia Gasanova.
Dos tenistas con tiros muy potentes aunque diferentes en dinámica se topaban en las instalaciones de Melbourne Park. Cocciaretto tuvo que transcurrir mediante momentos de apuro al tener que levantar seis bolas de quiebre en su segundo juego al servicio. La checa estaba sirviendo como es de costumbre, y las sensaciones mostradas no eran malas en intercambios de poco ritmo, pero la eficacia en esos momentos trascendentes le rebajaba. Por fin, a la décima opción de break que dispuso en este primer set, consiguió cuajar el 4-3.
Dos de doce en bolas de break en el primer set
Con la derecha cruzada estaba consiguiendo hacer mucho daño. Se montaba muy bien en la bola y además, la checa también optaba por jugarse con la invertida. La transalpina, por su parte, competía muy precipitada por instantes queriendo buscar el winner sin haber laburado el punto, y aquello le costó errores no forzados. Tuvo que presenciar dos bolas de set en contra cuando servía. Salvó la primera con un gran revés paralelo, pero la segunda fue error y Pliskova finalizó el set con dos breaks de 12 oportunidades.
Los primeros juegos del segundo parcial fueron tranquilos para las sacadoras. El ritmo en pista no era alto y los puntos caían sin muchos intercambios. Nuevamente, llegaba la hazaña de los breaks para una Pliskova que estaba sirviendo cerca de la perfección y un quiebre le haría un favor enorme.
En el sexto juego, no pudo aprovechar tres bolas, pero a la cuarta lo cosechó y se puso a servir con 4-2. Sacó adelante su turno de saque y tras pasar por el banco, se vio cómo tenía bolas de partido al resto. Lo cosechó a la segunda gozando de buenas sensaciones pese a que se quede la tarea de las bolas de quiebre (4/17) para el próximo duelo.