La china Qinwen Zheng borró del mapa a la japonesa Naomi Osaka en el WTA de Roma tras vencerla con parciales de 6-2 y 6-4. La china se mete entre las ocho mejores del certamen, esperando por Gauff o Badosa.
Confortable triunfo de Zheng en Roma
El duelo de asiáticas entre la china Qinwen Zheng (7°) y la japonesa Naomi Osaka (173°) tomaba lugar en los octavos de final del WTA 1000 de Roma. Zheng, finalista del Australian Open, no ganaba dos partidos seguidos desde Dubai. La china tuvo un fugaz paso por Madrid, debido a que estuvo obligada a retirarse en el primer partido. Osaka, quien supo estar en la cima del tenis femenino, llegaba a este partido sin ceder sets y desplegando su reconocido nivel.
Zheng mostró toda su eficacia
Un arranque sumamente intenso de las tenistas jugando al límite en cada punto. Zheng consigue un quiebre en el juego inicial tras un fallo de la japonesa. Osaka no permitió que la china tome distancia en el marcador, propuso mayor velocidad y recuperó el servicio. Zheng rompió nuevamente con el saque de su oponente luego de una gran defensa impactando un tiro central y profundo que incomodó a la japonesa. Zheng logró sostener su servicio para ratificar el break. Los intercambios de muchos golpes molestaban a Naomi que no podía colocar sus ejecuciones y encadenaba errores. La séptima preclasificada jugó un tenis eficiente, firmó su tercer quiebre y selló la primera manga con un formidable 6-2.
La china jugó un partido preciso
Otro comienzo satisfactorio de Qinwen Zheng dándole amplitud a sus retornos que contrarrestaban el juego de la japonesa, logrando así un nuevo break. Las aceleraciones de Osaka llevaban poca colocación, lo que le permitía a su rival alcanzar los tiros y devolver con menos margen de error. La japonesa siguió insistiendo con la velocidad de sus impactos, pero solo le alcanzó para evitar otro desbalance en los números. Zheng sacó provecho de ese temprano quiebre, sostuvo el nivel durante todo el partido y se quedó con la victoria por 6-2, 6-4.