La estadounidense Venus Williams cayó en sets corridos (6-1, 6-1) ante Greet Minnen por la primera ronda del US Open 2023. Le belga chocará en la próxima instancia con Vekic o Vickery.
La longeva Venus Williams, hermana mayor de Serena, se presentaba una vez más en el Major norteamericano, esta vez en condición de invitada. A pesar de sus 43 años recién cumplidos, la californiana continúa disfrutando del deporte que la vio nacer y crecer, apreciando los grandes escenarios en los que puede competir y los pequeños desafíos que aún tiene por afrontar. Si bien todavía no lo hizo oficial, el retiro probablemente esté a la vuelta de la esquina. Por ello, el público se toma un tiempo para verla y quedarse con un gran recuerdo. Hoy, en quizás la segunda pista más prestigiosa del circuito, debía enfrentarse a Greet Minnen, proveniente de la fase previa y No.93 del mundo. Es cierto que pudo haber sido sorteada con una preclasificada, pero no es nada positivo medirse a una jugadora con semejante ritmo.
La de Turnhout firma un triunfo soñado
El duelo comenzó nada favorable para Williams, que se veía rápidamente superada en velocidad y potencia de los tiros. Minne no tuvo piedad y golpeó en el primer juego, sin aviso previo. Igual, la local fue cogiendo adaptación en aquel. Lo inició 0-40, levantó aquellas dos bolas de break y para su mala suerte no pudo con la tercera. La belga no se quedó conforme con esa diferencia, y siguió presionando, moviendo de lado a lado a su rival y jugando un tenis sobresaliente. Consecuentemente, se encontró con otra rotura y marcó una abultada diferencia de 5-1. Williams no logró estirar la agonía un game más, y cedió el primer parcial por 6-1, en más de cuarenta minutos.
En el segundo, Minnen no le dio chances. La opacó totalmente con todo tipo de variantes. Aces, winners y dropshots. Se adueñó de dos quiebres seguidos, que la depositaron 4-0 en el marcador. Ante la enorme desigualdad, Williams no se inmutó y continuó intentando, aunque no le encontraba la vuelta. Lo único que consiguió fue romper el cero, para no cerrar una noche desastrosa con una bicicleta. Pese a eso, la belga no dudo y avanzó por un contundente 6-1 y 6-1.